Jorge Ignacio Palma, el asesino confeso de Marta Calvo, podría mentir sobre cómo se deshizo del cuerpo de la joven y sobre su adicción a la cocaína. Los informes psiquiátricos concluyen que se trata de una persona tempestuosa, antisocial, histriónica y compulsiva.
El asesino de Marta Calvo miente sobre cómo la descuartizó
El informe psiquiátrico-forense de especialistas del Instituto de Medicina Legal de Valencia encargado por el Juzgado de Instrucción número 20 ha llegado a varias conclusiones sobre el presunto asesino de Marta Calvo, Lady Marcela y Arlene.
Estas conclusiones desmontan las atenuantes pedidas por su defensa para rebajar la pena a la que se podría enfrentar en caso de confirmarse que fue él quien mató a Marta Calvo.
En primer lugar, los forenses, que se han entrevistado tres veces con el acusado para analizar su comportamiento, consideran que Jorge Ignacio Palma "no presenta alteraciones psicopatológicas, ni síntomas de enfermedad, deficiencia o trastorno mental alguno". Lo que sí muestra son "rasgos de personalidad antisocial", aunque ninguno de esos rasgos le llevarían al nivel de un trastorno de personalidad antisocial.
Versiones contradictorias sobre cómo se deshizo del cuerpo
Después de estas conversaciones con Palma, que se encuentra en prisión provisional desde 2019, los psiquiatras forenses también advierten que su relato acerca del descuartizamiento de Marta Calvo es contradictorio.
Llegan a esta conclusión después de que él mismo relatase a la Guardia Civil que había empezado a desmembrar el cuerpo por la pierna derecha, pero a los médicos insistía que había sido por la izquierda.
Este hecho "Llama la atención considerando la elevada carga de fijación amnésica que se le atribuye a una acometida de esa naturaleza, decidiéndose para la acción y empezando a ejecutarla. En la misma línea sorprende la ausencia de carga afectiva con que relata el proceso de descuartizamiento, con frialdad impropia", añaden estos especialistas.
Es decir, que olvidarse de por qué pierna empezó es casi imposible teniendo en cuenta el trauma que supone realizar acciones de este tipo, que fijan los detalles en la memoria. Además, los psiquiatras resaltan la frialdad con la que habla del tema y da detalles al respecto.
No consumía tanta cocaína como él declaraba
"Al preguntarle por qué decide descuartizarla refiere que fue un momento de desesperación que atribuye a su situación previa, aclarando que se refiere a sus antecedentes penales y su condición de emigrante", recoge también el documento.
Por otro lado, el informe forense desmonta el argumento de la defensa, que pedía aplicar una atenuante porque el acusado consumía cocaína a diario, lo que podría haberle provocado trastornos.
Pero los médicos dudan que eso fuera cierto, ya que los análisis toxicológicos en los pelos del detenido mostraron que no usaba de forma relevante esta droga desde aproximadamente julio de 2019, unos cuatro meses antes de su detención.
Estas pruebas chocan con declaraciones anteriores de Jorge Ignacio, que afirmaba que durante los tres últimos años anteriores a ser arrestado consumía todos los días entre 0,5 y 2 gramos.
"Tempestuoso, antisocial, histriónico y compulsivo"
Es por eso que los forenses consideran que podría mentir intencionadamente acerca de cómo se deshizo del cuerpo y de su consumo de cocaína, que estuvo involucrado en la muerte de Marta Calvo.
Esta hipótesis se respalda además en el estudio de la personalidad del acusado, que definen como tempestuosa, antisocial, histriónica y compulsiva; además de mostrar "indiferencia afectiva y frialdad emocional".
Palma es de origen colombiano, tiene antecedentes por narcotráfico y se encontraba en situación irregular en España. Está siendo investigado por el asesinato de Marta Calvo, Lady Marcela y Arlene, además de estar acusado de intentar matar a otras cinco jóvenes.
La Fiscalía y las acusaciones han reclamado que sea procesado por asesinato, agresión sexual, omisión del deber de socorro y delito contra la integridad moral de las víctimas.
Siguen buscando el cadáver de Marta Calvo
Hace unas semanas, la señal de su móvil mostró una nueva zona en el municipio de Manuel donde podría encontrarse el cuerpo de Marta Calvo, que pronto hará tres años que desapareció, donde la Guardia Civil hizo una batida.
Sin embargo, la nueva búsqueda no dio resultados, dejando a la familia "descolocada".
Paralelamente, la continua conflictividad de Jorge Ignacio en la prisión de Picassent, en Valencia, ha provocado su traslado a la cárcel de Albocàsser, en Castellón, mientras la investigación sigue en marcha.
Su entrega y detención, el 4 de diciembre de 2019 en el cuartel de Carcaixent, Valencia, se produjo 28 días después de que se perdiese la pista a Marta Calvo, una joven de 25 años de Estivella que se citó con el sospechoso a través de internet.