La Guardia Civil está investigando dos tiendas de mascotas de Mataró por un presunto delito de tráfico ilegal de animales. Los responsables de los establecimientos participarían en un entramado para traer cachorros desde países de Europa del Este hasta la capital del Maresme, desde donde los venderían por diferentes puntos de Catalunya. Durante este trayecto, normalmente por carretera desde Eslovaquia, Eslovenia o Hungría, los perros estarían en unas condiciones pésimas y sin vacunar, haciendo que cogieran diferentes enfermedades que les podría llegar a costar la vida.
Uno de los establecimientos investigados es la tienda Guau Guau, en la Vía Europa, según ha adelantado el diario La Vanguardia. El pasado viernes, agentes del Seprona de la Guàrdia Civil estuvieron inspeccionando el local. No es la primera vez que este comercio está en el foco de los investigadores por este motivo. En enero de 2022 ya llegó a ser clausurado por la venta ilícita de perros provenientes de Europa del Este. Al cabo de un tiempo, sin embargo, volvió a abrir. Actualmente, es habitual ver camiones con matrículas de Eslovaquia aparcar ante el negocio y descargar varios cachorros, que una trabajadora entra en un carrito de supermercado. A veces, incluso, el vehículo sube a la acera y descarga dentro mismo del local. Los vecinos, hartos de la situación, lo graban en vídeo y lo hacen público.
Sin vacunar y en condiciones lamentables
Los perros vienen desde Europa del Este con pocos meses de vida, sin vacunar y en pésimas condiciones. Hacen el trayecto durante días por carretera, encerrados dentro de una pequeña jaula, sin casi comer ni beber. Algunos de ellos cogen enfermedades graves como la parvovirosis o el virus del bromo. Al llegar a Catalunya, no pasan la cuarentena que correspondería y se les falsifica un pasaporte sanitario y una cartilla de vacunación. Se dice que tienen más edad y que están criados en España, así se ofrece más garantías y se pueden vender a un precio más alto.
Posteriormente, sobre todo a través de su página web, se venden y distribuyen por todo el territorio catalán. Si la mascota muere al cabo de pocos días de estar con la nueva familia, tienen una garantía de reposición y ofrecen otro gratuitamente. Este 'modus operandi' es el mismo que utilizaban los propietarios de una tienda de mascotas de Valencia, que esta semana han sido condenados a prisión por eso. En el caso de Mataró, la Guardia Civil sigue investigando y de momento no hay detenciones.