Noche trágica de Tots Sants en Lleida. Un hombre ha muerto este sábado, 1 de noviembre de madrugada, en un incendio que ha arrasado la sexta planta de un edificio situado en la calle Comtes d'Urgell de Lleida. El fuego, totalmente desarrollado a la llegada de los cuerpos de emergencia, ha obligado a desalojar a los 23 vecinos del domicilio y a confinar a los residentes del edificio de enfrente por precaución. Los Bombers han recibido el aviso cuando faltaban siete minutos para la una de la madrugada, e inmediatamente se han movilizado siete dotaciones con una veintena de efectivos, cuatro camiones de agua, una autoescalera y dos vehículos de mando. Cuando han llegado, el fuego quemaba con intensidad en la parte superior del inmueble, de siete pisos, uno de ellos planta baja, y las llamas salían ya por el tejado.
Los equipos de extinción han trabajado desde dentro y también desde el exterior para intentar controlar las llamas y localizar posibles víctimas. Poco después, en el interior de uno de los pisos de la sexta planta, se ha encontrado el cuerpo de un joven de 23 años. Los Bombers lo han evacuado hasta la quinta planta, donde el médico del Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM) ha certificado su muerte. Según las primeras informaciones, no habría más afectados.
Vecinos desalojados
Por seguridad, todos los vecinos de las plantas inferiores han sido desalojados y no han podido pasar la noche en sus viviendas. Los del bloque de enfrente han recibido, además, la orden de cerrar puertas y ventanas y de confinarse hasta que el humo se disipara.
El incendio ha dejado gravemente afectados los dos pisos de la sexta planta, que han quemado completamente, y el tejado, de vigas de madera y panel sándwich, ha quedado muy dañado. Los dos pisos inferiores, los de la quinta planta, también han sufrido filtraciones de agua durante las tareas de extinción del fuego. Un técnico municipal del Ayuntamiento de Lleida ha inspeccionado el edificio y, hasta que no se determine su seguridad estructural, los vecinos no podrán volver a su casa. Una vez el incendio ha sido apagado y el nivel de monóxido de carbono ha disminuido, los Bombers han acompañado a los vecinos del edificio a recuperar su documentación y objetos personales.
Investigación abierta
Hasta este bloque de pisos de la calle Comtes d'Urgell de Lleida se han desplazado también seis dotaciones de la Unitat de Seguretat Ciutadana de los Mossos d'Esquadra, que han protegido la zona mientras los Bombers hacían sus tareas pertinentes. Después, han realizado una inspección ocular y se han hecho cargo de la investigación y de las diligencias judiciales para esclarecer las causas del fuego. Aun así, según ha podido saber ElCaso.com, las primeras informaciones indican que no hay indicios de criminalidad.