Un hombre ha muerto este viernes al quedar atrapado bajo un inodoro público en el centro de Londres. Según los servicios de emergencia, la víctima se encontraba reparando el orinal cuando quedó atrapado de tal manera que los bomberos tardaron dos horas en rescatarlo, pero ya era demasiado tarde.
El trágico accidente ha tenido lugar en torno a la una del mediodía (hora local) en la calle Charing Cross Road de la capital británica, muy cerca de Trafalgar Square. El hombre estaba trabajando para reparar un inodoro hidráulico, un formato de orinal público que solo está disponible durante la noche, mientras que durante el día está retraído bajo tierra. La principal hipótesis de las autoridades locales es que, mientras llevaba a cabo las tareas de reparación, el inodoro habría empezado a bajar, aplastando al trabajador.
Un rescate muy complicado
La víctima quedó atrapada entre el pavimento y el inodoro, sufriendo heridas muy graves. Más de 20 bomberos de las estaciones de Soho, Euston y Dowgate trabajaron para intentar salvarle la vida, así como varias ambulancias, agentes del equipo de respuesta en zonas peligrosas y de la unidad táctica de la policía, así como una ambulancia aérea. El mecanismo del inodoro estaba defectuoso, por lo que no pudieron hacer que se elevara y tuvieron que utilizar un cabrestante. Finalmente, después de dos horas el hombre pudo ser liberado.
No obstante, la magnitud de sus heridas hizo imposible que los sanitarios desplazados al lugar lo pudieran reanimar, y la víctima fue pronunciada muerta a la escena. Desde el Ayuntamiento de Westminster han ordenado el cierre del resto de inodoros hidráulicos de la zona por precaución, y se ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias del accidente. Este tipo de inodoros se introdujeron en Londres hace unos años, una iniciativa que pretende disuadir a las personas de orinar en la calle.