Rosa Peral se defiende de las acusaciones de haber ordenado y organizado una agresión a una funcionaria de la prisión de Mas d'Enric, en Tarragona. La abogada de la condenada por el caso de la Guardia Urbana, Núria González, ha negado que su cliente ordenara el ataque a la trabajadora del centro penitenciario donde cumple condena de 25 años por el crimen de Pedro Rodríguez, que cometió junto con Albert López, en mayo de 2017. "Es absolutamente falso", ha aseverado la letrada en Catalunya Radio este viernes en referencia a la planificación del ataque en la cárcel. Pero no solo eso, sino que también ha relacionado las quejas que interpusieron con la acusación de ser la capo del módulo de mujeres de Mas d'Enric.
González también ha negado que existan informes de funcionarios donde conste esta acusación y ha remarcado que a ellos nadie les ha dicho nunca nada ni les ha llegado ningún requerimiento. "Alguien se ha puesto muy nervioso", ha asegurado en la radio pública. La abogada ha relacionado estas informaciones con el hecho de que han presentado varias quejas por el trato que recibe Peral en la prisión por parte de tres funcionarias y que llevó a una reunión entre el padre de la condenada y la dirección del centro penitenciario hace unos días. Las quejas, además, se remontan a hace meses, según ha explicado la letrada, y se le han sumado otras reclusas.
Rosa Peral y la orden de agresión a una funcionaria
No obstante, la defensa de González contrasta con los informes que citaba Segre este jueves, donde se especificaba, supuestamente, que Rosa Peral había instigado y planificado la agresión a una funcionaria de la prisión de Mas d'Enric, en Tarragona. La víctima, residente en Lleida, fue asfixiada y le arrancaron varios mechones de pelo. Además, tal y como explicaba el rotativo ilerdense, la condenada a 25 años entre rejas por el crimen de la Guardia Urbana de Barcelona, habría pagado con tabaco y droga el ataque que ejecutó otra reclusa.