Tras cuatro años de proceso judicial, el equipo responsable de la creación de El Hormiguero, el famoso programa presentado por Pablo Motos, ha sido condenado a una indemnización de 16.000 euros para la ilustradora valenciana Mar Hernández, conocida como Malota, por haber utilizado una ilustración suya sin permiso y haber insultado su arte en varios episodios de la gallina de los huevos de oro televisiva de Pablo Motos.

La multa a la gallina de los huevos de oro de Pablo Motos

Así lo ha decidido la Audiencia Provincial de Madrid después de varios recursos de las dos partes, condenando a la productora 7 y Acción S. L. y al grupo de comunicación Atresmedia a indemnizar a Hernández con 16.000 euros más intereses por la vulneración de propiedad intelectual que se llevó a cabo en 2018 en el espacio El Hormiguero 3.0, en el cual se mostró la obra de la denunciante Astrónomo como decoración en un sketch que además despreció la ilustración.

El programa presentado por Pablo Motos ha sido condenado por robar la propiedad intelectual de una ilustradora / Europa Press

La decisión judicial ha sido anunciada en un comunicado de la Associació de Professionals de la Il·lustració Valenciana (APIV), de la que Mar Hernández es socia y en la que trabaja en el departamento legal el abogado Àlex Devís, que ha llevado el caso. Aunque la sentencia tiene fecha del 11 de febrero, no se ha comunicado hasta ahora, ya siendo en firme, cuando se han resuelto los recursos y apelaciones interpuestos por la productora denunciada, 7 y Acción S. L., y por Malota.

Daño moral a la artista 'Malota' por un sketch en 2018

En el mismo comunicado se explica que durante los cuatro capítulos en los que se mostró sin consentimiento, no solo se causó "un evidente perjuicio patrimonial, sino que fue susceptible de provocar daño moral", ya que circunstancias como que encontrase su obra Astrónomo por sorpresa y descubriendo la infracción a través de la televisión cuando se vio su ilustración, han supuesto finalmente motivos de daño moral. De hecho, también se añade el factor de que la obra había sido impresa en baja calidad, además del contexto en el que se mostró durante el sketch del programa de Pablo Motos, poco después de que lo abandonase su famoso personaje El Hombre de Negro, que hoy en día tiene otros proyectos.

Y es que, según se lee en la sentencia, en el gag la pieza se presenta "como parte del apartamento de un personaje de aspecto descuidado y sucio, con una decoración que pretende estar a juego con el personaje" y aparece colocada torcida sobre una pared, además de la opinión explícita de otro de los personajes del sketch, que asegura que quien ha creado todo el decorado "no tiene ni puta idea de decoración". Por último, se incluye la agravante de la persistencia en la infracción, puesto que el clip era accesible a través de redes sociales y televisión a la carta.

La artista y su abogado se muestran contentos con el resultado y aprovechan para animar a reclamar siempre en este tipo de situaciones, tal como recoge el comunicado de palabras de Devís: "Sigue estando demasiado extendida la creencia de que, en el ámbito del arte, en los sectores creativos en general, el trabajo se hace por vocación, privándole del valor que tiene. Lamentablemente, estamos ante un colectivo muy maltratado y estos casos son importantes porque sirven para que se tome consciencia de que la legislación de propiedad intelectual otorga derechos a los autores y de que no hay que bajar los brazos ante las infracciones".