Un exalumno de 19 años entra en la escuela 175 de la ciudad rusa de Kazán y mata a tiros a siete alumnos, a una maestra y a una empleada del centro educativo. También hay otras 21 personas heridas.
Tiroteo por parte de un exalumno en Kazán
Tragedia en Rusia. Un chico de 19 años identificado como Ilnaz Galiáyev, se ha presentado en su colegio, el 175 de la ciudad de Kazán, en el suroeste de Rusia, con una escopeta de repetición de fabricación turca, legalmente registrada, y ha matado a tiros a siete alumnos, una profesora y otra empleada, además de herir a 21 personas.
Todo ha pasado en apenas ocho minutos y el asesino se cebó especialmente con la clase 8a, donde ha abierto fuego mientras asistían a clase.
En las imágenes difundidas en las redes sociales se ve a niños huyendo y alguno saltando por las ventanas del tercer piso, mientras que otros bajaban por unas escaleras portátiles que los servicios de emergencias habían apoyado en la fachada.
Siete niños muertos, dos empleadas y 21 heridos
Tras perpetrar la matanza, Galiáyev ha salido de la escuela con los brazos en alto para entregarse a la policía de Kazán, capital de la república rusa de Tatarstán, de mayoría musulmana.
Según el vicepresidente del comité de Seguridad de la Duma o Cámara de Diputados de Rusia, Alexandr Jinshtein, el atacante había conseguido el permiso de tenencia de arma de fuego poco antes de la tragedia: el 28 de abril, lo que le permitió adquirir una escopeta turca Hatsan ESCOTR PS, que se vende en Rusia por unos 430 dólares.
Además, "no había guardias de vigilancia en la escuela de Kazán donde ocurrió la tragedia. Solo había un botón de alarma", que ha sido pulsado por la portera del edificio.
En su declaración, el joven explicaba: "Tomé conciencia de que soy dios. Nadie me lo dijo, yo mismo tomé conciencia... Despertó un monstruo y empecé a odiar a todos".
"Despertó un monstruo y empecé a odiar a todos"
El presidente de Tatarstán, Rustam Minninjánov, que ha declarado el miércoles día de duelo por las víctimas, confirmó la masacre: "Hemos perdido a siete niños: cuatro chicos y tres niñas. También a una profesora y a una trabajadora". En cuanto a los heridos hospitalizados, 18 son niños de edades comprendidas entre 7 y 15 años, y algunos de ellos están en estado grave.
El pasado abril el autor del ataque había sido expulsado por mal rendimiento académico del instituto de formación profesional adjunto a la universidad TSIBI de Kazán.
"Era un estudiante tranquilo, no era conflictivo... Era respetuoso con sus compañeros y con los profesores", ha dicho a la agencia oficial TASS una fuente del instituto.
Un excompañero de instituto de Galiáyev ha asegurado al digital Gazeta.ru que es una persona muy encerrada en sí misma y "prácticamente no hablaba con nadie". "Siempre andaba de mal genio y parecía cansado, sobre todo últimamente, cuando aún venía al instituto", ha añadido.
Necesidad de revisar la normativa de tenencia de armas en Rusia
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, ha presentado sus condolencias a los familiares de las víctimas y ha ordenado al Gobierno proporcionar toda la ayuda necesaria.
También considera que hay que "elaborar con urgencia una nueva normativa sobre los tipos de armas que se pueden vender a la población", según ha declarado el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
La Defensora de Pueblo, Tatiana Moskalkova, ha pedido elevar de 18 a 21 años la edad mínima para poseer armas de fuego, salvo para aquellos que hayan servido en las fuerzas armadas. Es una medida que "debe adoptarse de manera urgente", ha insistido.
El Comité de Investigación de Rusia ha abierto un caso penal por asesinato masivo.
El ataque en la escuela de Kazán es el más cruento en un centro educativo ruso desde octubre de 2018, cuando un estudiante de 18 años mató a 20 personas e hirió a más de 40 en un instituto de formación profesional en la península de Crimea, tras lo cual se suicidó.