Este martes Óscar, el principal sospechoso de la muerte de Esther López en Traspinedo (Valladolid), ha declarado a los juzgados por sus múltiples mentiras y contradicciones en el caso. Aunque los investigadores tienen muchos indicios que podrían demostrar su presunta autoría, lo han dejado en libertad sin cargos y han salido a la luz los motivos de esta decisión, que tanto han sorprendido a todo el mundo.
Óscar ha sido sometido a un largo interrogatorio para justificar todas las lagunas de su coartada, ya que según los guardias civiles "tiene graves contradicciones". Cuando la jueza le ha preguntado todo aquello que no le cuadraba, el sospechoso se ha limitado a responder una vez y otra: "no tengo ninguna explicación".
Las múltiples mentiras que Óscar no puede justificar
Los hechos a los que Óscar no encuentra "ninguna explicación", son, por ejemplo, que el móvil de Esther estaba en su casa horas después de que se le perdiera el rastro. Por si no fuera poco, el sospechoso asegura que después de dejar a Esther en la carretera, se fue a dormir, pero su iPhone delata que mintió: se conectó al Bluetooth del coche y el contador de pasos del móvil detectar que caminó más de 500 pasos cuando él asegura que estaba durmiendo.
En todo eso se le tiene que sumar la extraña actitud de Óscar los días posteriores a la desaparición de Esther, ya que limpió en numerosas ocasiones su coche nuevo y, así y todo, encontraron ADN de la joven de Traspinedo en el maletero del vehículo.
Estos son solo algunos de los datos que no cuadran de sus declaraciones, pero hay muchas más que hacen, que, a ojos de los investigadores, se convierta en el principal sospechoso de los hechos. Teniendo en cuenta todo eso y que la acusación pedía su entrada en la prisión provisional, ¿cómo puede ser que la jueza lo haya dejado en libertad sin cargos?
El principal motivo por el cual Óscar está en libertad sin cargos
El principal motivo es que todavía no se saben los resultados de las más de 500 muestras de ADN que han recogido después de más días de cacheos en casa del sospechoso y, por lo tanto, no hay ninguna prueba concluyente, solamente indicios que, a ojos de la jueza, no son determinantes.
Tampoco hay un relato 100% corroborado de que pasó aquella noche del 12 de enero a Traspinedo (Valladolid). Así pues, a pesar de todas las contradicciones y mentiras del sospechoso, de momento, está en libertad sin cargos. Habrá que esperar a saber los resultados de las pruebas de ADN para ver si, se lo acaba imputando por los hechos.