El juez de la Audiencia Nacional está investigando a Andrea Zanon, financiero de origen italiano afincado en los Estados Unidos, por una estafa piramidal de magnitudes millonarias. Lo que fue consultor del Banco Mundial fundó el año 2020 una plataforma de compraventa de criptomonedas, NIMBUS Platform, con la cual desplumó a más de 600 inversores, prometiéndolos beneficios surrealistas solo para acabar congelando los activos de la empresa y dejar a las víctimas sin acceso a su dinero.

Según la investigación llevada a cabo por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, la entidad de Zanon, con sede en Malta y que actualmente está en poder del empresario griego Odysseas Kimiskez, accionista único de NIMBUS, funcionaba como una verdadera organización criminal. Aprovechando la notable trayectoria del financiero, que pasó incluso por la Casa Blanca, asesorando al expresidente Clinton, creaban una sensación de legitimidad y seguridad para atraer potenciales clientes. A partir de aquí se estableció esta estafa piramidal: daba a los inversores un certificado electrónico que, supuestamente, respaldaba el dinero que habían depositado en la entidad, pero, en vez de dedicarse a la compraventa de bitcoins, como anunciaban, el dinero se blanqueaba transfiriéndolo a terceras personas. El 9 de octubre de 2020, NIMBUS Platform suspendió su actividad, bloqueando todos los fondos captados.

Detenido en Barcelona por estafa

Según el acta judicial, Andrea Zanon promocionaba la plataforma con vídeos de YouTube donde ponía especial hincapié en su trayectoria profesional, deliberadamente allanando el camino para los inversores. Más de 600 personas han presentado denuncias, muchas de ellas en Barcelona, Huelva, Zaragoza y Granada, por unos perjuicios de casi 129 millones de euros. Durante los primeros meses de existencia de la plataforma, Zanon fue el único accionista, hecho que cambió cuando colocó a Odysseas Kimiskez al frente, nombrándolo CEO, director y secretario al mismo tiempo, y transfiriendo la totalidad de las acciones a su nombre. Cuando empezó a circular el rumor de las irregularidades de NIMBUS Platform, y coincidiendo con las primeras denuncias, Andrea Zanon cerró sus redes sociales, quedando inaccesible para las víctimas, que empezaron a acudir en masa a la policía.

Después de tres años bajo escrutinio de las autoridades, la Guardia Civil lo detuvo en el aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat cuando se disponía a hacer una escala el pasado viernes hacia Dubai, donde tenía intención de participar en la cumbre de la COP28 en calidad de inversor. Este lunes declaró ante la Audiencia Nacional, negando toda vinculación con esta trama, llegando, incluso, a pagar a expertos para borrar su huella digital. Así y todo, la gran cantidad de pruebas contra él han hecho que el juez decretara su ingreso en la prisión de manera provisional, una decisión que podría haber eludido pagando los 60.000 euros fijados como fianza, lo que, de momento, no ha hecho.

La Guardia Civil estima en 128,13 millones de euros, unos 135,8 millones de dólares al cambio, la cantidad que Zanon y sus colaboradores se han embolsado con este macrofraude. La investigación, por otra parte, continúa en marcha por los delitos de estafa agravada, blanqueo de capitales y organización criminal