Los Mossos d'Esquadra han detenido a un hombre de 38 años en Mollet del Vallès, acusado de ciberacoso y corrupción de menores a través de internet. El arrestado supuestamente, había utilizado cinco perfiles virtuales falsos para ganarse la confianza de sus víctimas, mayoritariamente menores de edad, y conseguir material pornográfico. La investigación policial estima que hay en torno a 153 menores afectados por este modus operandi, según detalla Área Central de Cibercrimen de la DIC. Como es habitual, en un exceso de celo para controlar y esconder la información, los Mossos han evitado dar la nacionalidad del hombre detenido y otros detalles de la investigación.
La investigación se inició el pasado agosto, cuando una madre denunció que su hija de 13 años había mantenido contacto a través de las redes sociales con un usuario que se hacía decir "Dani", quien se presentaba como un chico de 15 años. A partir de este vínculo, la menor acabó creyendo que tenía una relación sentimental con él. El hombre incluso creó personajes ficticios, como la hermana, la madre y el tío del supuesto chico, para manipular a la menor y conseguir imágenes sexuales de ella.
Un modus operandi trabajado
El detenido utilizaba una estrategia bien planificada para captar a sus víctimas. Se hacía pasar por un joven de su edad para establecer un vínculo de confianza con la menor. Además, creaba diferentes personajes para influir en ella, desinhibirla sexualmente y convencerla de grabar y enviar fotografías y vídeos de carácter pornográfico. Estos personajes ficticios cubrían todos los pilares relacionales de la menor, aislándola de los suyos familiares y amigos con el fin de tomar el control, según han podido detallar los Mossos que han llevado la investigación.
En el marco de la investigación, los especialistas en cibercrimen de los Mossos d'Esquadra han descubierto que el hombre no tenía antecedentes, pero había estado llevando a cabo esta actividad criminal desde el 2019. En el teléfono móvil y el ordenador intervenidos, se localizaron indicios clave, como nueve perfiles activos diferentes que utilizaba para contactar masivamente con menores, representando varios roles para llegar al número mayor de víctimas posible. También se encontraron 1.400 archivos gráficos relacionados con esta actividad, de los cuales 419 eran de contenido de pornografía infantil explícita.
Se esperan más víctimas
Los Mossos d'Esquadra están trabajando para identificar el máximo número de víctimas posibles y ofrecerles apoyo para que puedan denunciar los hechos. Con esta información, después de ser arrestado, se espera que otras víctimas, conociendo ahora el modus operandi y como se hacía llamar en Instagram, puedan denunciar los hechos. Las autoridades alertan sobre los peligros del ciberacoso y recuerdan la importancia de que las familias supervisen la actividad en línea de los menores para detectar comportamientos sospechosos. La colaboración entre padres, educadores e instituciones es esencial para prevenir estos delitos y proteger los más vulnerables, según detallan los Mossos d'Esquadra.