La Policía Nacional ha encontrado en Barcelona, escondido de la justicia de Rumania, a Alin Rotaru, un hombre nacido el año 1986, muy conocido a su país por haberse convertido en un vendedor de marihuana y también, con el dinero que ganó, haber abierto una plataforma televisiva por internet que pirateaba emisiones deportivas y que causó grandes pérdidas a las cadenas de televisión de Rumania y de otros países de la zona. Desde 2021, según la documentación localizada, estaba en España, donde con documentación falsificada, había podido regularizar su situación administrativa.

Buscado por doble agresión sexual

Ahora, sin embargo, estaba buscado por uno agresión sexual a dos chicas, las dos menores de edad, que secuestró durante horas en un apartamento de Bucarest a fin de que mantuvieran relaciones sexuales entre ellas, mientras las apuntaba con una pistola. Los hechos que motivaron esta petición de detención y entrega en Rumania tuvieron lugar, supuestamente, el mes de julio del 2013 cuando Alin Rotaru retuvo a las dos víctimas en su apartamento y las obligó a mantener relaciones sexuales entre ellas.

No es la primera vez que este hombre que ahora estaba escondido en Catalunya tenía problemas con la justicia. El año 2009 ya fue condenado por tráfico de drogas por la venta de marihuana a cinco años y cuatro meses de prisión, pero consiguió escapar de la policía, y hasta ahora. Ahora tendrá que responder de aquella condena y también de esta investigación por secuestro y agresión sexual. Alin Rotaru, sin embargo, ya era conocido por sus negocios al margen de la ley. Puso en marcha una cadena de tiendas que vendía drogas y también, después, con los beneficios, activó una televisión por internet, Spice TV, que emitía contenidos piratas.

En España desde 2021 con documentación falsifica

En el momento de ser arrestado en Barcelona, los agentes de la Policía Nacional que se encargan de buscar y cazar fugitivos en nuestra casa, le retuvieron todos los documentos de identidad, los cuales acreditaban que el reclamado había utilizado una identidad falsa desde el 2021, de la cual hizo uso para quedarse en nuestro país y "regularizar" la situación administrativa. No fue fácil, pero las investigaciones y los seguimientos de los investigadores permitió poder llegar a detenerlo en Barcelona al conocido allí como el "Regele etnobotanicelor", el "el Rey de la etnobotánica".