El cónsul de Pakistán, Mirza Salman Baig, ha sido destituido de su cargo por, presuntamente, haber agredido sexualmente a una trabajadora de la embajada, que también lo ha denunciado por acoso sexual. Según el testimonio de la víctima, el acoso era constante y en una ocasión, la intentó violar en un hotel de Barcelona. No obstante, el presunto acosador todavía no ha sido detenido.
Tal como adelanta El Periódico, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Pakistán ha echado a Salman Baig fruto de las denuncias presentadas por la trabajadora de la embajada de Barcelona. Concretamente, lo acusa de un delito de agresión sexual continuado, otro de acoso sexual con violencia y uno tercero de acoso sexual en el ámbito laboral.
Cesado el cónsul de Pakistán de la embajada de Barcelona
La víctima es una mujer que trabaja en la embajada desde el 2019. En enero de este 2022, Salman Baig, que había sido también cónsul del Pakistán en Australia, empezó a trabajar en la embajada de Barcelona como nuevo cónsul del país asiático. Según su testimonio, el infierno empezó cuando el presunto violador la ascendió a secretaria personal.
La mujer, que ha explicado a El Periódico con todo tipo de detalles la pesadilla que vivió durante meses, asegura que Salman le pidió que se descargara Viber, una aplicación que permite chatear de manera secreta: todos los documentos y mensajes enviados se borran al cabo de 24 horas.
Mensajes de carácter sexual y fotos del cónsul desnudo
A través de esta aplicación, presuntamente, le enviaba mensajes de carácter sexual y fotografías de él desnudo. De estas acusaciones no tiene pruebas, ya que si hacía capturas de pantalla a los chats, a él le salía una notificación de alerta.
Pero el acoso no se quedaba solo en internet. Según su testimonio, los meses de abril y mayo le obligaba a quedarse en la oficina, le hacía proposiciones sexuales y comentarios muy inapropiados. Pero lo peor de todo estuvo cuando, presuntamente, le preparó una emboscada en el hotel Viladomat de Barcelona. Le dijo que fuera a comprobar si tenían una zona habilitada por fumadores y, una vez allí, la forzó hasta que ella huyó llorando.
Salman Baig dice que todas las acusaciones sueño falsas
Según la versión del presunto violador y acosador, las acusaciones de la víctima son falsas y explica que se lo ha inventado todo porque sabía que la quería despedir. Habrá que esperar a saber cómo avanza la investigación para ver si se pueden demostrar los hechos que, por su naturaleza, son muy difíciles de demostrar judicialmente.