El rapero Morad, original del Hospitalet de Llobregat (Barcelonès, Barcelona) desata las masas allá por donde pisa. El cantante se encuentra de gira por toda España y su último concierto, en la localidad de Torre del Mar (Málaga), quedará en el recuerdo de todos sus asistentes por el descontrol que dentro la carpa reinaba. El concierto de Morad tuvo que ser suspendido después de que se produjeran estampidas entre los asistentes, debido al exceso del aforo que había en la carpa donde tuvo lugar la actuación del rapero catalán. Además, muchos otros asistentes denuncian amenazas por parte de jóvenes y la presencia de armas, como navajas, e incluso gas pimienta, en un recinto donde había mayoritariamente menores de edad que querían disfrutar de su cantante favorito.
El concierto del cantante tuvo lugar la madrugada del pasado miércoles, 27 de julio, en el marco de las fiestas de la localidad malagueña de Torre del Mar, perteneciente al término municipal de Vélez-Málaga. De hecho, la actuación del fenómeno de masas Morad era el plato principal del cartel de las fiestas, y se ofrecía gratuitamente, de modo que se preveía una gran afluencia de gente. No obstante, el rapero superó todas las expectativas, y según afirma la Policía Local a los medios locales, se concentraron unas 10.000 personas en un recinto habilitado para únicamente 2.000, sin que hubiera efectivos suficientes controlando el aforo ni el acceso a la carpa. El resultado fue el esperado: la suspensión del concierto ante las estampidas y conflictos que surgieron durante el mismo.
Los asistentes del concierto escalaban la carpa, saltaban sobre las vigas y subían a los baños portátiles
La marabunta de gente que quería asistir al concierto de Morad era tanta que el espacio habilitado no daba abasto, por lo que muchos de los asistentes que no lograron entrar en la carpa optaron por otras alternativas con el fin de ver al cantante. Así, muchos de los asistentes escalaron la estructura de la carpa y se sentaron en las vigas de la misma (aunque muchos también se quedaron de pie), provocando una peligrosa inestabilidad en el recinto, y haciendo que la carpa se balanceara de un lado a otro, según apuntan muchos testigos en sus cuentas de Twitter. A la vez, otros asistentes subieron a los distintos baños portátiles, así como a coches u a otros objetos elevados con tal de ver al artista. Una joven que estaba subida a la carpa cayó desde varios metros de altura y tuvo que ser atendida por la Cruz Roja, según han sabido fuentes policiales. En el vídeo, puede apreciarse la gran cantidad de personas que, de una manera u otra, querían conseguir un buen sitio desde el que disfrutar del concierto, a pesar de que fuera poniendo en riesgo su propia vida.
La cofradía que llevaba la barra denuncia amenazas de muerte, robos y "mucho miedo"
Los hermanos de la cofradía encargada de gestionar la barra dentro de la carpa donde tenía lugar el concierto denunciaron a los policías que sufrieron amenazas y que incluso llegaron a temer por su vida, según ha sabido el medio Diario Sur. Por si fuera poco, los asistentes robaron varias botellas de alcohol a la caseta, y amenazaban de muerte a los encargados de la barra cuando estos no les servían bebidas, fueran alcohólicas o no. De hecho, una de las amenazas mortales que se recoge en el informe policial al que ha accedido el medio local era por una botella de agua: "Te voy a rajar el cuello si no me das una botella de agua".
Ataques de ansiedad, peleas y avalanchas dentro del recinto
Dentro de la carpa, varios asistentes sufrieron ataques de pánico y ansiedad ante la gran aglomeración de gente que había por todos lados. Una chica llegó a desmayarse dentro de la misma carpa, según apunta una testigo en Twitter. A lo largo de la actuación, se produjo una avalancha de personas, sin que haya trascendido el motivo, aunque todo apunta a que la estampida se debió a una de las numerosas peleas que tuvieron lugar dentro del mismo recinto. Muchos asistentes denuncian que entre el público, donde abundaban menores de edad de entre 12 y 14 años, había personas con armas blancas, gas pimienta y sustancias estupefacientes. En el momento de la estampida fue cuando, según la misma testigo, apareció la policía.
Morad pidió repetidas veces a los asistentes que se comportaran
El cantante Morad, consciente de la situación de peligrosidad que vivían sus espectadores, paró el concierto en repetidas ocasiones para pedir al público que se comportara. Según afirman testimonios como Claudia en su cuenta de Twitter, el cantante pidió que se hicieran "las cosas bien, que aquí hay niños pequeños", que las personas bajaran de la carpa, y que se hiciera un pasillo para dejar pasar a la chica que había sufrido un desmayo. No obstante, a pesar de la buena voluntad del rapero, los asistentes hicieron caso omiso. Finalmente, el alcalde de Torre del Mar ordenó suspender el concierto a la 01:05 de la madrugada.