Comprarse una casa y, mientras la estás limpiando y adecuando para entrar a vivir, encontrarse con una inesperada sorpresa. Eso es lo que le ha pasado a una familia en el distrito de Vicálvaro, en Madrid. El nuevo propietario y su madre estaban limpiando la terraza cuando encontraron una maleta metálica y pensaron que sería del anterior inquilino. La dejaron guardada pensándose que seguramente se la habría dejado y volvería a buscarla, pero los días fueron pasando y no venía nadie. Así pues, decidieron abrirla para ver qué había en el interior y se encontraron con que estaba llena con kilos de droga.
Al ver todo aquello, rápidamente alertaron del hallazgo a la Policía Municipal de Madrid. Hasta el lugar se desplazaron varios agentes, que comprobaron que en el interior de la maleta había 39 envoltorios de color negro y preservativos, todos ellos llenos de una sustancia blanca y con textura cristalina en su interior. En total, más de seis kilos de una sustancia que se ha podido confirmar en el laboratorio como metanfetamina. Además, también había una báscula de precisión, una navaja, una cartilla bancaria, un puñal, una tarjeta de equipaje de vuelo y diversa documentación.
La policía encontró otra maleta y una bolsa con paquetes de tabaco vacíos
Se confrontó la documentación con el antiguo propietario del domicilio, un hombre de origen chino que había vendido el piso a través de una agencia inmobiliaria. Al inspeccionar la vivienda, además, se encontró otra maleta abierta en una cama con documentación de la misma persona. En el lavabo, también encontraron una bolsa llena de paquetes de tabaco vacíos, como los que algunos traficantes utilizan para camuflar pequeñas cantidades de droga. Todas las pruebas que había en el interior del piso fueron requisadas por la Policía Municipal para su investigación y para intentar descubrir de dónde procedía la droga.