En plena Semana Santa con celebraciones religiosas por todo el país, en L'Hospitalet de Llobregat se ha clausurado un centro de culto que suponía un peligro para las familias que iban a él, muchas de ellas con niños y niñas de corta edad. El espacio religioso estaba ubicado en una especie de local situado en el número 10 de la calle del Migdia, justo delante de la comisaría de la Guardia Urbana, cuerpo que se ha encargado de la clausura, y se encontraba en unas pésimas condiciones, incumpliendo los mínimos requisitos de seguridad que podría tener un equipamiento de estas características.
Han optado por clausurar el centro antes de que haya una desgracia
Desde la Guardia Urbana han apuntado que se ha decidido clausurar el local y obligar a los responsables a cesar la actividad y desalojar el espacio de forma provisional después de que, aunque ya se les había advertido previamente de las graves carencias en las medidas de seguridad, no hubieran hecho todavía ningún paso para regularizar la situación, suponiendo un riesgo real para las personas asistentes a las misas, muchas de ellas familias con niños.

El local, tal como se puede ver en imágenes compartidas por el cuerpo municipal, contaba con bombonas de butano al acceso de todo el mundo, cableado colgado por todas partes de cualquier manera y conexiones eléctricas hechas de manera peligrosa y con algunos cables pelados, cosa que podía provocar un incendio. En este sentido, la gran cantidad de material inflamable que había dentro, podría haber comportado que pudiera haber sido una tragedia que hubiera acabado con víctimas mortales.
Así pues, este domingo por la mañana, efectivos de la Unidad de Convivencia y la Policía Administrativa de la Guardia Urbana de l'Hospitalet han accedido al local, han echado a todas las personas que había dentro y han clausurado el local para que no se pueda llevar a término ninguna actividad. De momento, el centro de culto, destinado a personas de origen africano, seguirá cerrado hasta que cumpla los requisitos mínimos de seguridad, momento en que podrá reabrir.


