Cinco de los diez heridos este sábado por la mañana al caer un telesilla en la estación de esquí de Astún, en Huesca, continúan ingresados en el hospital, aunque evolucionan favorablemente y sus vidas no corren peligro. De estos, dos son menores de edad y también hay dos chicas de 18 años que están a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Universitario Miguel Servet de Zaragoza y del Hospital Clínico, respectivamente. En cuento a los dos menores, uno de ellos es el hermano pequeño de la adolescente ingresada en el Clínico, y también tiene cama en la UCI, aunque sus heridas no revisten gravedad, por petición de la familia de que estuvieran juntos, según ha informado el Gobierno de Aragón; está previsto que pasen a planta en las próximas horas. Por otra parte, hay una señora de 67 años ingresada con pronóstico estable en el Hospital San Jorge de Huesca y una niña en el Hospital Infantil que también se recupera correctamente.
La caída del telesilla dejó a dos personas heridas de gravedad y a ocho leves que tuvieron que ser trasladadas a centros médicos. Otras veinte personas también quedaron afectadas, pero los sanitarios que se desplazaron hasta la estación de Astún pudieron darles el alta in situ después de tratar sus lesiones y asegurarse de que no habría ninguna complicación.
La rotura de la pieza más débil del telesilla, culpable del accidente
El susto que se llevaron las decenas de personas que este sábado disfrutaban de un día en la nieve se produjo alrededor de las once y media de la mañana. Según la Guardia Civil, fue la rotura de la pieza más débil del telesilla lo que provocó que el cable perdiera tensión, haciendo que los telesillas se desestabilizaran, algunos incluso quedando colgados del revés. La estación de Astún cerró preventivamente todo el recinto y evacuó a los esquiadores, pero este domingo ha vuelto a abrir sus puertas al público.