Los Mossos d'Esquadra han conseguido detener al hombre que a finales del pasado mes de septiembre agredió sexualmente a dos mujeres en Calafell, una de las cuales menor de edad. Los hechos tuvieron lugar el día 27 cuando, hacia las ocho y media de la mañana, el individuo abordó a una adolescente cuando iba de camino al instituto por el paseo de la Unió. Le hizo tocamientos contra su voluntad e intentó ir a más, pero la chica consiguió escapar. Fue corriendo hacia el centro escolar y explicó, asustada y entre llantos, lo que le acababa de pasar. Algunos padres y vecinos de la zona, entre los cuales se extendió la voz de alarma, alertaron a los cuerpos policiales. Poco rato después, fue una mujer quien también denunció que la habían intentado sobar. En los dos casos, según la descripción facilitada por las víctimas, era el mismo atacante.

El agresor no tenía antecedentes policiales

Los Mossos d'Esquadra, con la colaboración de la Policía Local de Calafell, abrieron una investigación con el fin de descubrir quién era el agresor sexual que andaba suelto por las calles de este municipio del Baix Penedès (Tarragona). Agentes de la Unidad de Investigación de la comisaría del Vendrell se hicieron cargo de las diligencias y, gracias a la descripción facilitada por las víctimas, se estableció un listado con los posibles agresores, que se fueron descartando uno por uno, según ha adelantado el Diari de Tarragona. El hombre no tenía antecedentes policiales, un hecho que ha provocado que su identificación se alargara más de lo previsto.

Finalmente, este jueves, hacia las once y media de la mañana, ha podido ser localizado y detenido en la plaza de Santa Anna de Bellvei. Se trata de un hombre de 26 años de quien los Mossos no han facilitado nacionalidad y que vive en el Baix Penedès, donde le constarían residencias en varios pueblos. Ha sido trasladado a las dependencias de los Mossos del Vendrell y, tras pasar a disposición judicial, ha ingresado en prisión comunicada y sin fianza acusado de dos delitos de agresión sexual sin penetración, aunque sí con violencia e intimidación.