La Guardia Civil ha conseguido desmantelar un grupo de estafadores con ramificaciones en Catalunya que conseguían obtener dinero de sus víctimas engañándolas haciéndose pasar por trabajadores de su entidad bancaria. La investigación, que ha acabado con la detención de siete personas, se inició a mediados de septiembre del año pasado a raíz de la denuncia de un vecino de Urduliz, en Vizcaya, a quien habían estafado más de 19.000 euros con un método conocido como Caller ID Spoofing.

Los estafadores llamaron a la víctima simulando ser trabajadores de su entidad bancaria y lo hicieron de forma que en la pantalla apareciera el número real del banco para que así no sospechara que se trataba de una estafa. Le explicaron que había sufrido varios intentos de transferencias fraudulentas y le pidieron que abriera la aplicación del banco en su móvil y que hiciera diferentes transferencias a unas cuentas supuestamente seguras, que se encontraban en la nube, y que el dinero le sería devuelto. Así pues, el hombre hizo dos transferencias por valor de 13.980 y de 5.716 euros. Al cabo de unos días, al ver que no le volvían a ingresar el dinero, llamó al banco para saber qué pasaba y le dijeron que ellos nunca le habían llamado y que todo se trataba de una estafa.

Los estafadores desviaban el dinero para no dejar rastro

La víctima denunció los hechos a la Guardia Civil, que abrió una investigación para saber quién había detrás del fraude. Los investigadores, estirando el hilo, consiguieron identificar a los titulares de las cuentas donde el hombre había hecho los ingresos, dos hombres residentes en Barcelona y uno en Girona. No obstante, con el fin de no dejar rastro, los estafadores habían ido desviando y moviendo el dinero por varias cuentas o los habían retirado en algún cajero automático. Además, también habían hecho aportaciones a cinco productos bancarios de diferentes entidades.

Finalmente, los investigadores de la Guardia Civil pudieron identificar y detener a los siete miembros de la banda, dando así la organización por desmantelada. Los arrestados son dos vecinos de Girona, dos de Barcelona y tres más residentes entre Sevilla y Valencia acusados de los delitos de estafa, blanqueo de capitales y pertenencia a grupo criminal.