Han salido a la luz los detalles de la vida secreta de Nelson, el presunto asesino de homosexuales en serie de Bilbao (Vizcaya). Este joven de 26 años tiene pareja, trabajaba como repartidor de pollo y su entorno cercano lo describe como "un chico normal, educado, trabajador, obediente y nada conflictivo". Actualmente, está en la cárcel como presunto autor de cuatro muertes violentas y hay una investigación abierta para averiguar si hay más víctimas.

Nelson David, de 26 años y de nacionalidad colombiana, tenía una doble vida. Trabajaba como repartidor en un asador de su suegra, que está convencida de que es inocente, una teoría que no comparte la investigación de la Ertzaintza ni el juez que lo ha enviado a la prisión provisionalmente. Mónica, la madre de su pareja, lo define como una persona trabajadora, muy educada y que nunca se metía en problemas.

"Siempre estaba dispuesto a ayudarme"

"Llevaba los encargos a los clientes. También iba a la frutería y a comprar algún producto que necesitara. Siempre estaba dispuesto a ayudarme", explica la mujer a El Español. De hecho, fue esta mujer quien lo animó a presentarse en comisaría para dar explicaciones sobre este "malentendido".

Así pues, se presentó en una comisaría de Irún (Guipúzcoa) diciendo que era inocente, pero teniendo en cuenta la gravedad de los hechos, las pruebas y los indicios, lo detuvieron como presunto autor de cuatro asesinatos y dos tentativas de homicidio.

Contactaba con las víctimas a través de una aplicación de citas

El testimonio de un hombre que consiguió huir de este presunto asesino fue clave. Según las investigaciones policiales, el hombre contactaba con las víctimas a través de una aplicación de citas, quedaba con ellos, los drogaba con éxtasis líquido para conseguir las contraseñas de sus cuentas bancarias y, posteriormente, los mataba.

Ertzaintza / Europa Press
La Ertzaintza investiga cuatro muertes violentas en Bilbao (Vizcaya): el presunto autor de los hechos se llama Nelson David y ha ingresado en la prisión de manera provisional / Europa Press

El testimonio de un superviviente, clave para la investigación de la Ertzaintza

El superviviente de Nelson había quedado con este hombre con anterioridad para mantener relaciones sexuales. Un día este hombre le ofreció éxtasis líquido, pero la víctima se negó a tomar. Fue entonces cuando lo intentó matar estrangulándolo y cuando vio que los vecinos oían los gritos, huyó del lugar de los hechos, pero se dejó la mochila con la documentación y la droga, que fueron pruebas claves para la investigación de la Ertzaintza.