Hace más de 14 años de la muerte de Marta del Castillo y su asesino ha confesado el crimen, pero el caso todavía no está resuelto. Su cuerpo no ha aparecido nunca y el autor del crimen no ha confesado el lugar exacto donde se deshizo del cadáver. El padre de la chica, Antonio del Castillo, insta a la policía a buscar en una finca privada dónde cree que su hija podría estar enterrada, pero la Policía Nacional espera la autorización del propietario para poder hacerlo. En este contexto, la empresa Lazarus Technology ha hecho público el informe final sobre el análisis del teléfono móvil de Miguel Carcaño, el asesino de la joven.

Se trata de una investigación que empezó a hacerse en marzo de 2021 y que se ha alargado durante dos años. En su momento ya se presentó un primer informe de 500 páginas al juzgado, pero ahora se ha acabado el estudio, que se divide en varias partes. Según el director ejecutivo de Lazarus Technology, Manuel Huertas, el informe contiene "información valiosa para que la pueda utilizar la Policía, a la espera de que lo vea el juez". Entre esta información hay nuevas pistas que podrían apuntar al lugar donde se podría encontrar el cadáver de la chica, como la ubicación de Miguel Carcaño la noche en qué tuvieron lugar los hechos.

El padre de Marta del Castillo pide que se la busque en una finca privada

La publicación del informe final sobre el estudio del móvil del asesino confeso de Marta del Castillo se produce solo dos semanas después de que el padre de la joven, Antonio del Castillo, denunciara la inacción de la Policía Nacional después de que les pidiera que registraran una finca privada donde cree que podría estar enterrada su hija. Esta sospecha está basada en la última declaración de Miguel Carcaño, en la que dio detalles sobre el lugar donde había enterrado a la chica que no había explicado hasta ahora. Gracias a eso empezaron a investigar dónde podría estar hasta que encontraron una finca con las características indicadas.

En el terreno hay una zanja con un pozo en la punta donde, según la teoría del padre, podría estar enterrada la chica. La misma familia intentó excavar para encontrar los restos, pero ante la imposibilidad de hacerlo pidió a la Policía Nacional que lo hiciera con una máquina excavadora. Desde el cuerpo policial, sin embargo, aseguran que no lo han podido hacer antes porque eran terrenos agrícolas plantados y que han tenido que pedir autorización al propietario con el fin de poder entrar.