El incidente de Montornès del Vallès, que esta noche ha acabado con un hombre muerto, abatido por un agente de la Policía Local de este municipio, habría todavía podido ser peor. Según ha podido saber ElCaso.com, el policía que ha abierto fuego para detener el ataque del hombre armado con un cuchillo es un agente en prácticas que había acabado el curso de la escala básica en el ISPC hace pocas semanas. Cuándo volvieron a la comisaría, se encontraron al hombre ya en el interior de las dependencias, que ya había superado una primera puerta de acceso restringido, y estaba amenazando al único agente que había en la comisaría, que no iba armado. El agente en prácticas, cumpliendo el protocolo, abrió fuego y pudo abatir al hombre, un joven de nacionalidad extranjera, de unos 25 años y origen subsahariano. El rebote de una de las balas impactó en el agente, que no llevaba chaleco antibalas, y resultó herido en la zona del tórax.
Tres agentes y una sola arma
Consciente, tal como adelantó ayer ElCaso.com, fue trasladado al Hospital de Sant Pau, donde ya ha sido intervenido y, aunque está fuera de peligro, sigue ingresado en la UCI, pendiente de su evolución. Se da la circunstancia de que en el momento de los hechos, en el turno de noche, solo había tres agentes trabajando: el policía en prácticas, el agente de la puerta y un policía interino, que hacía patrulla con el agente en prácticas. Según ha podido saber ElCaso.com, de los tres, solo iba armado el agente en prácticas. El policía que estaba en la comisaría tiene el arma retirada y el agente interino no tiene habilitación para llevar arma de fuego.
Tal como también pudo adelantar ayer ElCaso.com, poco rato después de los hechos, los Mossos d'Esquadra no consideran los hechos un ataque terrorista y ha sido la División de Investigación Criminal (DIC), de la Región Metropolitana Norte, quién se ha hecho cargo del caso para aclarar los hechos y poder presentar, en el juzgado de guardia de Granollers, el atestado explicando todos los hechos. En la declaración que ya se ha recogido de los dos agentes que entraron en la comisaría cuando el atacante ya estaba en el interior, aseguran que el hombre que accedió armado a las dependencias policiales ya se había enfrentado a ellos con anterioridad, cuando estaban haciendo el cierre de las puertas del cementerio del municipio. El hombre, desde un balcón, los increpó. Más tarde lo encontraron con un cuchillo de cocina, de grandes dimensiones, en el interior de la comisaría, y tuvieron que abatirlo antes de que pudiera hacer daño al único agente que estaba en el interior del edificio. La investigación, de los pocos detalles que no se han conocido, se encuentra bajo secreto de sumario, según fuentes judiciales.

La Policía Local, sin medios ni recursos
Este incidente, y que durante el servicio de esta noche solo hubiera tres agentes, y solo uno con arma, un policía en prácticas recién salido de la formación, es la crónica de una desgracia anunciada, según han explicado varias fuentes a ElCaso.com. Hace años que la Policía Local de Montornès del Vallès, un municipio de 18.000 personas, pero con un gran número de industrias, junto a Montmeló, ha entrado en un "declive y degradación", sobre todo por la falta de personal y de medios técnicos. Los últimos años, muchos agentes, por la falta de medidas de seguridad y de personal, se han marchado de la policía del municipio. Fuentes de la policía de la ciudad aseguran que, si bien son conscientes de que el Ayuntamiento de Montornès no quería que eso pasara, también aseguran que no se ha hecho todo lo posible para evitar un hecho así, olvidando la seguridad de los agentes y de las dependencias policiales.