El próximo año, en el 2026, se celebrará la Copa Mundial de Fútbol, un acontecimiento que, a pesar de estar a diez meses vista, ya tiene a la gente esperando con ilusión para disfrutar con las victorias de su país o llevarse una decepción si este no cumple con su papel. La FIFA, responsable de la organización del torneo, no se ha hecho esperar y, el pasado 10 de septiembre, abrió la posibilidad de comprar las entradas con antelación para un grupo reducido de personas. Este lunes se anunciarán los afortunados ganadores de este sorteo, pero la FIFA advierte, antes de que llegue el momento, que se tiene que ir con pies de plomo, ya que se han detectado un montón de páginas web fraudulentas que, muy posiblemente, busquen estafar a los fans del deporte.

Una campaña de ciberseguridad hecha esta semana por Check Point Research ha revelado que en los últimos 60 días se han registrado más de 4.300 nuevos dominios que incluyen términos relacionados con la FIFA, el Mundial o las ciudades donde se jugarán los partidos. Según alertan, entre todos estos dominios hay muchísimos que buscan hacerse pasar por la federación y conseguir los datos y el dinero de las personas que, con intención de ver un partido, caigan en el engaño y les den información personal.

Evitar que nos la cuelen

Para evitar problemas relacionados con este tipo de estafas, desde la FIFA recomiendan vigilar el día 29, cuándo se anunciará a los ganadores del sorteo de venta anticipada y, por descontado, a partir del día siguiente, cuando se abrirá el proceso para todo el mundo. Si se recibe un correo o un SMS felicitándonos por haber ganado el sorteo, se tiene que estudiar muy a fondo que realmente venga de una fuente oficial y no se trate de un engaño. Por otra parte, antes de comprar entradas a través del portal web, tenemos que revisar de la misma forma que no sea una página fraudulenta que lo imite y nos deje no solo sin ver el partido, sino, directamente, sin un solo euro en el bolsillo. Para evitar caer en estafas, es importante fijarse en el diseño de la web, el logo, el enlace y las faltas de ortografía, entre otras cosas. Si alguno de estos detalles nos hace sospechar, lo mejor que podemos hacer es no dar ningún dato personal y, si hace falta, ya veremos el partido desde casa.