Boris Becker, la estrella del tenis, tendrá que pasar dos años y medio en prisión en el Reino Unido por varios delitos fiscales. El alemán escondió grandes cantidades de dinero y otros activos financieros para que no se los embargaran después de declararse insolvente en 2017.
El pasado 29 de abril se dio a conocer la condena que debía cumplir el alemán. Ha sido un proceso realmente largo, que ha implicado cerca de cinco años de investigación y juicios. Ahora el que fuera el mejor tenista del mundo deberá de renunciar a una vida privilegiada, propia de un millonario, para estar 15 días en Wandsworth, una de las peores prisiones del Reino Unido. Después, será trasladado a otro centro penitenciario de tipo C, lo que implica condiciones más permisivas.
Becker escondió cerca de tres millones de euros para que no se los quitasen por sus costosas deudas. Poco antes de declararse en bancarrota en 2017 intentó rehipotecar su casa de Mallorca, pero fue descubierto y empezó una larga investigación en la que se descubrieron grandes cantidades enviadas a otras cuentas bancarias, acciones de una empresa tecnológica y una gran casa en Alemania.
La defensa de Boris Becker se basó en que el divorcio entre la estrella del tenis y Barbara Feltus, su exmujer, fue extremadamente costoso y que la antigua pareja del tenista se llevó gran parte del patrimonio del alemán, que no supo gestionar las ganancias de su carrera deportiva y lo que ganó como comentarista de la BBC y siendo el entrenador de Novak Djokovic.
¿Cómo es la prisión a la que irá Boris Becker?
Wandsworth es una prisión situada a las afueras de la ciudad de Londres y está considerada como una de las más duras del Reino Unido. Según un informe de Charlie Taylor, inspector jefe de prisiones, los presos están 22 horas diarias en sus habitaciones sin hacer nada. Además, el ambiente es realmente violento y las peleas entre reclusos son muy habituales. De hecho, los funcionarios tuvieron que intervenir usando la fuerza 1295 veces en 2021.
El centro penitenciario Wandsworth es considerado de categoría B, lo que implica que los presos tienen poca libertad si lo comparamos con una cárcel de categoría C. De hecho, Becker será trasladado a una de estas al no considerarlo peligroso, pero todavía se desconoce en qué centro deberá de cumplir su condena de dos años y medio.
Según Mirror, durante los primeros días Becker tendrá una celda para él, pero se espera que se le coloque en una con un compañero después de que hayan pasado unos días. Se trata de habitaciones de tres metros de largo y dos de ancho. El inodoro está en el mismo habitáculo y no tiene ningún tipo de separación, cortina o pared.
Los detalles sobre Wandsworth
Chris Atkins, un antiguo preso de Wandsworth, escribió un libro en el que relataba su experiencia en esta cárcel y denunciaba las malas condiciones en la que estaban los reclusos. Destacó que lo que más impacta a los recién llegados es el ruido que hacen sus compañeros: "El ruido constante, te paraliza al entrar. Hay siempre gente gritando, dando golpes, amenazando, riéndose, gimiendo, llorando o hasta aullando como si fueran lobos. Es como si alguien hubiera descargado todos los efectos de sonido y los estuviera reproduciendo a todo volumen a la vez", escribió.
También describió, con mucha precisión, el tipo de personas que están encerradas en esta prisión: "Es básicamente una mezcla entre Porridge y Alguien voló sobre el nido del cuco, y está llena de las personas más aterradoras que he visto en mi vida. Además, todo el edificio parece estar atrapado en 1895".
Esta cárcel, que está a dos kilómetros de Wimbledon, lugar en el que Becker se consagró como campeón tres veces, está "llena de ratas" según han afirmado varios presos. Lo que implica que las condiciones sanitarias no son las mejores para los reclusos y los trabajadores de esta institución.