Solo unas horas después de que cuatro chicos violaran a una niña de 13 años en el centro comercial Màgic de Badalona, el viernes pasado, otra chica, también menor de edad, fue víctima de una agresión similar. En torno a las seis de la tarde del sábado, siete jóvenes, entre menores y mayores de edad, y entre los cuales también se encontraba el novio de la víctima, la agredieron sexualmente con penetración, según ella misma ha declarado delante de los Mossos d'Esquadra. Cinco de los chicos implicados ya han podido ser detenidos por la policía catalana, todos ellos menores de edad. En las interrogaciones, los cinco han confesado que fue la pareja del adolescente quien los "invitó" a violarla, y algunos de ellos tienen imágenes del ocurrido a sus teléfonos móviles.
Cinco menores arrestados
Según ha avanzado La Vanguardia, los investigadores de los Mossos d'Esquadra ya han podido identificar y detener a cinco de los presuntos violadores, todos menores de edad. Los chicos, según han explicado, fueron invitados por el novio de la víctima para mantener relaciones sexuales con ella en grupo, contra su voluntad. La policía catalana y la Policía Local de Badalona acudió al lugar de los hechos, en el barrio de Sant Roc del Municipio, en torno a las seis de la tarde, que es la hora aproximada a la que recibieron el aviso de la agresión.
Al llegar, los presuntos violadores se fueron corriendo. La chica, que estaba sufriendo un fuerte ataque de ansiedad, quedó a cargo de una agente de los Mossos mientras esperaban la llegada de una ambulancia del Sistema de Emergencias Médicas (SEM). Cuando se tranquilizó, confesó a la agente que entre los siete chicos la habían penetrado vaginalmente sin su consentimiento.
La chica fue trasladada al hospital de Can Ruti para evaluar su estado, donde también fue atendida por una psicóloga del hospital Vall d'Hebron de Barcelona, especializada en casos de agresión sexual. A estas alturas, la Unidad Central contra Agresiones Sexuales (UCAS) de los Mossos d'Esquadra tiene una investigación abierta par encontrar y detener a los jóvenes restantes, mayores de edad.