Los Mossos d'Esquadra relacionan la banda de ladrones desarticulada la semana pasada en varios puntos del área metropolitana de Barcelona, dedicada a asaltar camiones en la AP-7, con más de 40 robos, tres de ellos con violencia, y habiéndose hecho con un botín de casi un millón de euros. La investigación de este grupo de ladrones, que los Mossos dan por desarticulado, empezó en octubre de 2023 en Tarragona, en la zona del Pont del Diable, la zona que sirvió para dar nombre al caso, el caso Diable. Tal como avanzó la semana pasada ElCaso.com, los ladrones robaban vehículos BMW X5, un vehículo de alta cilindrada, para poder escapar fácilmente, y, además, también usaban extintores para poder atacar a la policía si los detectaban y los perseguían.

Los robos se concentraban mayoritariamente en las áreas de servicio y descanso Porta de Barcelona, Montseny, Bellaterra y Sant Celoni de la autopista AP-7; aunque también se detectaron algunos hechos ocurridos en las autopistas C-58 y C-33. Los investigadores, bajo el mando del subinspector Ivan Clotet, jefe de la antigua Unidad Operativa de Movilidad (UOM), ahora integrada en el Área Central de Investigación Vial de la División de Tránsito, han podido relacionar a los autores con 42 delitos desde octubre del año pasado, así como robos en el interior de vehículos, robos con violencia e intimidación, daños, delitos contra la seguridad del tránsito, robos y hurto de uso de vehículos y falsificaciones documentales, atentado contra los agentes de la autoridad y pertenencia a grupo criminal.

 

Los seis detenidos suman 102 antecedentes, todos por robos. Los asaltos en casa de los objetivos se realizaron con la Brigada Móvil debido al potencial nivel de peligrosidad de los detenidos, todos de nacionalidad española y etnia gitana, tal como avanzó ElCaso.com la semana pasada.

Los registros sirvieron para localizar algunas de las mercancías sustraídas, llaves de vehículos susceptibles de haber sido robados, elementos característicos para cometer robos de la modalidad conocida como “teloner”, así como herramientas y dispositivos electrónicos para sustraer furgonetas y vehículos. En los registros también se localizaron ocho extintores que los investigados solían vaciar en el momento de la huida para rociar los vehículos policiales que los detectaban. Asimismo, también se recuperó un vehículo robado de alta gama y se intervinieron tres de los vehículos que utilizaba el grupo a modo de “lanzadera”, para abrir paso y detectar si había controles policiales.

Pero los ladrones detenidos en el caso Diable no solo robaban camiones en la AP-7. Es habitual que este tipo de ladrones también realicen alunizajes, y los investigadores de la UOM los han podido relacionar con un asalto en una empresa de la localidad de Castellví de Rosanes, de donde sustrajeron un botín valorado en 75.000 €. Durante los meses que ha durado la investigación, los ladrones han robado al menos ocho vehículos de alta gama que fueron recuperados, y al menos seis turismos y tres furgonetas, ya recuperadas también, que utilizaban para cargar los efectos sustraídos.

Fugas temerarias

Los ladrones detenidos, tal como explicó la semana pasada ElCaso.com, actuaban de manera muy selectiva y buscaban camiones que transportaran productos fácilmente distribuibles en el mercado ilícito, como ropa de marca, zapatos, complementos de moda, cosméticos, o incluso cápsulas de café. Utilizaban vehículos “lanzadera”, con los que realizaban una primera aproximación a los lugares de los hechos, para valorar la viabilidad de sus acciones delictivas. Se desplazaban a las áreas de servicio en horario nocturno y forzaban los remolques de los camiones, aprovechando que el conductor se encontraba durmiendo en la cabina. Una vez localizaban una mercancía que les interesaba y que consideraban que tenía una fácil salida y gran valor económico, cortaban la lona o forzaban la puerta del remolque del camión.

En caso de ser sorprendidos por los conductores de los camiones, los miembros de este grupo no dudaban en amenazar o usar la violencia contra ellos. También realizaban conducciones temerarias cuando eran perseguidos por vehículos policiales, aprovechando los vehículos robados de alta gama que utilizaban. En estos casos, circulaban a velocidades de más de 200 km/h, hacían zigzags por la autopista, rociaban los vehículos policiales con el contenido de extintores de incendios para dificultarles la visión e, incluso, llegaban a embestirlos para proteger la huida de las furgonetas cargadas; con el riesgo que esto suponía tanto para los agentes, como para otros usuarios de la vía.

Más de 200 detenidos en un año

Los Mossos han detenido a 221 multirreincidentes especializados en hurtos y robos en vías rápidas de Cataluña entre enero de 2023 y el primer trimestre de 2024. A partir de las investigaciones que se han llevado a cabo, se han dictado desde 2017 un total de 60 órdenes judiciales de alejamiento a ladrones que actúan en autopistas y autovías de nuestro país, ya sea con robos violentos como los del caso Diable o los robos por descuido contra turistas despistados.

Durante el primer trimestre de 2024, aproximadamente el 70% de los hechos corresponden a hurtos, un 20% a robos con fuerza tipo “telonero” y un 2% son hechos violentos. Este porcentaje se mantiene más o menos constante respecto a 2023, según los datos que han explicado hoy los Mossos d'Esquadra en una rueda de prensa. Durante las próximas semanas se realizarán controles específicos para evitar este tipo de robos contra turistas.