Francisco Marco, el exdirector de la agencia de investigación privada Método 3, se ha mostrado contundente: no se cree la versión de Julia Faustyna, la chica polaca de 21 años que afirma ser la desaparecida Madeleine McCann. La empresa de Marco fue contratada hace 15 años por Kate y Gerry McCann, los padres de la menor, con la esperanza de que pudiera encontrar a su hija y devolverla sana y salva.
El investigador pone en duda la versión de Faustyna
Faustyna tiene una cuenta de Instagram consagrada a demostrar que ella es Madeleine McCann. Sus argumentos se basan en una supuesta semejanza física, sobre todo porque las dos chicas presentan un coloboma en el ojo derecho, una mancha en el iris que es de nacimiento y que ambas tienen exactamente en el mismo sitio. La joven también ha asegurado que casi no conserva recuerdos de su infancia, y que al preguntar a sus padres estos le responden con evasivas.
Aun así, Marco ha sido rotundo en sus declaraciones al diario El Independiente: "Sin conocer en profundidad los detalles, no me cuadran. No creo que sea ella", ha dicho. La línea de investigación que siguió su agencia hace 15 años fue la posibilidad de que la niña hubiera sido secuestrada por un grupo de pederastas de Portugal. Los de Método 3, que tiene su sede en Barcelona, se decantaron por esta hipótesis después de recibir una información desde dentro del resorte de Praia da Luz, donde Madeleine estaba de vacaciones con sus padres, y de donde se esfumó sin dejar rastro el 3 de mayo de 2007.
Ni los agentes de los diversos cuerpos policiales, ni los investigadores privados pudieron descubrir nunca qué pasó realmente aquel día. La Fiscalía de Alemania acusó al pederasta Christian Brueckner, en prisión desde hace años por varios delitos de agresión sexual, pederastia y tráfico de drogas. No obstante, nunca se ha podido demostrar con certeza que haya sido él lo que secuestró a la pequeña Madeleine.
La prueba de ADN que lo podría cambiar todo
Julia Faustyna ha anunciado recientemente por su cuenta de Instagram que se ha podido poner en contacto con los padres de Madeleine y que estos han accedido a hacer las pruebas de ADN que determinarán la veracidad de las conjeturas de la joven. Previamente, había acudido a las autoridades de Portugal, Reino Unido y Alemania, y todos la desestimaron. El Scotland Yard en particular se negó a hacerle las pruebas, ya que, según sus investigaciones, Madeleine murió el mismo día de su secuestro. Además, la edad de las chicas tampoco concuerda: Madeleine tendría 19, mientras que Faustyna ya ha cumplido los 21.
Por otra parte, las autoridades policiales no se toman en serio los argumentos de Faustyna por no parecerse lo suficiente a los retratos robot que se han hecho de la desaparecida a lo largo de los años. Para el detective privado Francisco Marco, Julia Faustyna es una chica que "solo busca notoriedad".