Accidente mortal navegando en canoa por el río Sella, en Asturias. Un hombre catalán de 71 años ha fallecido este miércoles al sufrir un incidente mientras realizaba el descenso acuático, en un momento en el que suele haber corrientes suaves, aunque se habrían intensificado en esos momentos. Los hechos tuvieron lugar sobre las 12.50 horas, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de la localización de una persona inconsciente en la zona del coto de pesca de Alizo, en Parres. Hasta allí se trasladó una patrulla de Seguridad Ciudadana del Instituto Armado y los agentes comprobaron que se trataba del septuagenario que iba en la canoa junto a su esposa.

Intenta enderezar la canoa y muere arrastrado por la corriente del río

Al parecer, según las primeras informaciones, el hombre intentó enderezar la canoa tras sufrir un cambio de orientación a causa de la corriente, que suele ser suave en esta ya iniciada temporada de captura del salmón. Para ello, descendió de la embarcación y la reorientó, pero cuando intentó subirse de nuevo, no pudo y acabó siendo arrastrado por la corriente y quedó inconsciente. Más tarde fue trasladado al margen del río por un pescador que se encontraba en la zona y, tras ser alertados tanto la Guardia Civil como los servicios de emergencias, los facultativos sanitarios le realizaron las maniobras de reanimación, pero no pudieron hacer nada por salvarle la vida.

Los sanitarios tan solo pudieron constatar la muerte del hombre de 71 años, aunque no las causas. El levantamiento del cadáver se produjo sobre las tres y media de la tarda y fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Oviedo, donde se le realizará la autopsia para esclarecer si se ahogó o qué pasó. La Guardia Civil ha abierto una investigación también para descubrir cómo ha muerto. Según ha explicado el diario La Nueva España, la empresa K2 Aventura, que le alquiló la canoa, han reconocido estar "consternados" dado que "en treinta años de actividad nunca nos había pasado nada así".