La investigación de un tiroteo en Vilafranca del Penedès que dejó a un hombre herido el pasado mes de febrero ha llevado a los Mossos d'Esquadra a descubrir y desmontar un arsenal de armas de la Guerra Civil escondido en una vivienda de Miami Platja, en el Baix Camp (Tarragona), donde vivía un hombre nacional de 47 años quien, según las pesquisas policiales, se dedicaba activamente a traficar con armas de fuego y munición, así como a repararlas y habilitarlas para su uso de manera ilegal. El sospechoso quedó detenido por los Mossos el pasado 1 de julio después de la entrada y registro de su domicilio donde encontraron todas estas armas, extremadamente peligrosas, ya que, en caso de una detonación accidental, podrían afectar no solo a la vivienda que les servía de escondite, sino también a las casas vecinas con el evidente riesgo que eso supone para las personas.
Dentro de la casa se encontró una gran cantidad de armas consideradas de guerra: fusiles, ametralladoras, granadas, espoletas, vainas y proyectiles anticarros y de artillería. Para poder recuperar con seguridad todo el material, los agentes de la División de Investigación Criminal (DIC) de la Región Metropolitana Sur contaron con la colaboración de los especialistas del TEDAX que desarmaron los dispositivos explosivos antes de requisarlos. El responsable de todo este arsenal quedó arrestado, acusado de un delito de tráfico de armas.
Disparan a un hombre desde un coche en Vilafranca
Los hechos que han permitido localizar y detener a esta persona tuvieron lugar el pasado 7 de febrero. Según adelantó ElCaso.com, un hombre resultó herido en el culo de un tiro después de que unos individuos le dispararan desde un coche en la avenida de Tarragona de Vilafranca del Penedès. Los sospechosos huyeron, pero los Mossos los pudieron capturar al día siguiente en el barrio de Gaudí de Reus. Los tres hombres, de 24, 25 y 41 años y una veintena de antecedentes entre todos, quedaron detenidos por los delitos de lesiones y tenencia ilícita de armas.
Las primeras hipótesis, confirmadas más adelante por la investigación, apuntaban a una venganza relacionada con un tema de drogas, concretamente, de marihuana. Uno de los tres detenidos se dedicaba activamente al tráfico de sustancias, así como a cometer robos violentos en los que utilizaba armas de fuego. Con esta información, los investigadores estiraron el hilo hasta localizar a la persona que suministraba estas armas, el hombre detenido a principios de julio en Miami Platja.