Tatiana Beatriz, la joven de 25 años asesinada junto con su hija por su pareja la madrugada de este lunes en Madrid, había denunciado hasta en dos ocasiones al hombre, una de ellas por miedo a que se llevara a la niña a Perú, de dónde eran originarios. En septiembre del 2020, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid ordenó medidas de protección para la mujer, pero mes y medio después las retiraron (aunque en un primer momento se había informado de que las habían anulado hace dos meses), ya que, según el juez, "no había indicios" de que el acusado, Jhoel Antonio, agrediera a la víctima.
La primera de las presuntas agresiones tuvo lugar en julio del 2020. Aquel día, Jhoel Antonio golpeó a Tatiana Beatriz durante una discusión sin testigos. Más adelante, a principios de septiembre, volvió a agredirla y en aquella ocasión la amenazó con cuchillos. Todo eso fue considerado por un juez como "hechos aislados", considerando también que Tatiana, después de la segunda agresión, esperó una semana antes de poner la denuncia "siguiendo el consejo de su padre, que convivía con ellos." Finalmente, se decidió a denunciar, porque, como ella misma aseguró entonces, temía que el hombre se llevara a su hija a Perú, hecho con el que la había amenazado.
Absuelto después de dos años
Aunque la Fiscalía pedía para el acusado un año de prisión y tres de alejamiento, el Juzgado de lo Penal número 37 de Madrid absolvió a Jhoel Antonio en diciembre del 2022. Durante el juicio, Tatiana Beatriz declaró no recordar qué había pasado exactamente, y el policía que detuvo al hombre dijo que solo le habían informado de una discusión. De esta manera, los cargos contra Jhoel Antonio fueron retirados, y tenía libertad para ponerse en contacto tanto con su pareja como con la hija de ambos.
Desgraciadamente, las denuncias no estaban exentas de fundamento, y Tatiana Beatriz, junto con la pequeña Abril, han acabado muriendo a manos, presuntamente, de Jhoel Antonio quien, además, ha intentado quitarse la vida cortándose el cuello. Los servicios de emergencias recibieron el aviso del ataque este lunes alrededor de la una y media de la madrugada, alertados por la misma Tatiana, que, después de ser agredida, consiguió refugiarse en el parking del edificio, situado en la calle Jacobeo, con el teléfono móvil.
Para cuando llegaron los agentes, la niña yacía muerta en la cama, y Jhoel Antonio agonizaba en un charco de sangre en el salón. Los sanitarios del SAMU-Protección Civil consiguieron estabilizarlo, y lo trasladaron al hospital 12 de Octubre donde continúa ingresado en estado grave. La Policía Nacional lo ha detenido, acusado de un doble asesinato, que se investiga como violencia machista.