La Guardia Civil ha detenido a un joven de 22 años en la localidad de Sonseca, Toledo, acusado de un delito de tráfico de drogas. El arrestado se encontraba en una fiesta de música techno donde había acudido por, presuntamente, vender su mercancía. Los agentes lo pillaron cuando salía de la discoteca, ya que, al verlos, dio media vuelta e intentó marcharse a toda prisa. Al detenerlo, el joven manifestó encontrarse mal, asegurando que estaba sufriendo un ataque de ansiedad, con la esperanza de evitar un cacheo que delatara su actividad.

Empezó a convulsionar

Los hechos tuvieron lugar en torno a las cuatro de la madrugada, cuando los agentes observaron a un joven que salía de una discoteca de la localidad. Varias patrullas de la Guardia Civil habían sido movilizadas aquella noche con el objetivo de evitar que se produjera algún altercado en el contexto de la fiesta, y se fijaron en el chico cuando este empezó a comportarse de manera agitada al verlos. Dos de los agentes le siguieron hasta su coche, donde le detuvieron para pedirle la documentación y con la intención de registrarlo a él y en su vehículo.

En aquel momento el joven les dijo que no se encontraba bien, y se tiró en el suelo donde empezó a convulsionar. La policía se asustó, y llamaron a los servicios de emergencia, que acudieron rápidamente para atender al joven. Este, sin embargo, ya se encontraba bien cuando llegaron los sanitarios, y todo parecía indicar que había fingido un ataque de ansiedad para evitar ser registrado.

Llevaba encima toda clase de droga

Y es que el arrestado había escondido en su coche 16 gramos de cocaína, 33 gramos de MDMA, diez pastillas de LSD y cuatro botes de popper. Además, también aparecieron 600 euros en efectivo que el detenido habría obtenido de vender droga en la discoteca. La Guardia Civil lo acabó deteniendo, acusándolo de un delito contra la salud pública y de otro de tráfico de drogas.