Cazado un presunto pederasta en Málaga. Un hombre septuagenario ha sido detenido por la Policía Nacional por un delito de corrupción de menores en la ciudad andaluza. Los captaba mediante regalos y drogas, además de pagarles la ropa y otros caprichos como, incluso, la cuota del gimnasio. Los investigadores estiman que el número de víctimas ascendería a una veintena o más, entre menores y jóvenes que ya han hecho más de 18 años. El objetivo del individuo era obtener imágenes y encuentros de índole sexual, según ha informado la policía.

Regalos, drogas y dinero para abusar de chicos menores

El investigado, que ha quedado en libertad con cargos a la espera de juicio, llevaba a su domicilio a chicos menores de edad embaucados mediante la entrega de gran variedad de regalos, drogas y dinero para conseguir estos encuentros sexuales. De hecho, durante las primeras indagaciones, que se iniciaron en febrero después de recibir una carta anónima en una comisaría de la Policía Nacional alertando de la presencia del presunto pederasta en la ciudad; descubrieron que el supuesto autor de los hechos era un hombre de unos 70 años que vivía solo y no tenía descendencia. Poco después, comprobaron que era una persona muy activa en las redes sociales, con miles de seguidores, la mayoría de ellos por debajo de los 18 años.

Un punto algo sospechoso, pero no definitivo. Los agentes constataron al cabo de un tiempo que al domicilio del detenido iban niños y se estaban muchas horas dentro. "Había creado un clima acogedor para ellos, con acceso a drogas y alcohol, una videoconsola y televisión por cable con canales de fútbol y música", han informado desde la Policía Nacional. La investigación descubrió que las relaciones sociales que mantenía el hombre se limitaban casi exclusivamente a encuentros con jóvenes procedentes de familias desestructuradas, a los que acompañaba a su rutina diaria. Llegó a pagar la cuota del gimnasio a ocho jóvenes, mayores y menores de edad, haciéndose pasar por un familiar de ellos.

El septuagenario regalaba ropa a los chicos. De hecho, le compró toda la vestimenta para la graduación a uno de ellos. Todo ello, sumado a la facilidad para conseguir dinero y drogas, además del clima de tranquilidad y refugio que creó en su domicilio donde los jóvenes menores pasaban muchas horas. La Policía Nacional, ante todas estas evidencias, lo detuvo el pasado 7 de julio, aunque no ha sido hasta ahora cuando ha acabado la investigación con la descarga y análisis del material informático intervenido en su domicilio, que equivale a más de 70.000 folios en formato pdf. Sin embargo, el individuo ha quedado en libertad con cargos y está a la espera de juicio, después de que los hechos fueran puestos en conocimiento del juzgado de instrucción número 11 de Málaga.

Registro del domicilio del septuagenario

En el registro de su vivienda en Málaga se ha intervenido gran cantidad de archivos informáticos, que su volcado y análisis equivalen a más de 70.000 folios en formato pdf, que incluyen imágenes con menores desnudos y, en algunos casos, manteniendo relaciones con el arrestado, así como fotos en el inmueble consumiendo gas de la risa, hachís y alcohol. También se encontraron numerosas botellas de alcohol, una videoconsola, golosinas, tabaco, hachís, una cantidad abundante de paquetes de macarrones y tomate frito así como numerosos paquetes de calzoncillos sin abrir, entre otros efectos.