Las caravanas son un invento muy cómodo, ya que permiten trasladar una pequeña casa allá donde quieras simplemente remolcándola con el coche. Esta ventaja, sin embargo, también se puede convertir en un inconveniente, como bien han demostrado unos ladrones en l'Espluga de Francolí, en la Conca de Barberà, que se han colado en una finca, han enganchado una caravana a su coche y se la han llevado como si nada hasta que los Mossos han podido interceptarlos en Montblanc. De los dos ocupantes del vehículo, solo uno ha sido detenido, ya que el otro ha podido escapar de los agentes. El arrestado es un hombre de 33 años con antecedentes previos que ya ha pasado a disposición judicial. En su habitual exceso de celo, los Mossos d'Esquadra no han querido revelar la nacionalidad del detenido.
Los hechos tuvieron lugar sobre las nueve de la noche del pasado domingo 19 de octubre, cuando los Mossos recibieron una alerta desde Espluga de Francolí. Los propietarios de una finca en la zona del polígono industrial del municipio habían visto a través de las cámaras de vigilancia cómo dos personas se colaban en el recinto, enganchaban la caravana de las víctimas a un coche y se la llevaban remolcada. Afortunadamente, gracias a las imágenes, los propietarios tenían una descripción de los ladrones y del vehículo con el que huían.
Atrapados en la carretera
Varias patrullas salieron a buscar a los ladrones por la zona y, un rato más tarde, se les encontró circulando por la C-14, donde se les pudo interceptar. Cuando los Mossos les detuvieron, uno de los ocupantes, el pasajero, consiguió huir campo a través, pero el conductor no tuvo esa suerte y se le atrapó. El hombre intentó defenderse con argumentos sin sentido y contradictorios hasta que los agentes acabaron deteniéndolo por haber robado la caravana después de romper el candado de la valla y colarse en la finca donde estaba aparcada. En cuanto al otro ladrón, todavía se le está buscando.