Los Mossos d'Esquadra, con la colaboración de las policías locales de Lliçà d'Amunt y Santa Eulàlia de Ronçana (Barcelona), detuvieron el 1 de octubre a dos hombres, de 22 y 36 años, de nacionalidad etíope y nacionalidad brasileña, por un robo con violencia en una casa de Lliçà d'Amunt donde se cultivaba marihuana. La policía catalana detuvo a los propietarios de la marihuana, dos hombres, uno de 45 años de nacionalidad brasileña y el otro de 41 años de nacionalidad española, por tráfico de drogas.
Atacados con espacio pimienta para robar la marihuana
Los hechos sucedieron de madrugada del día 1 cuando la policía recibió el aviso que un grupo de personas habían entrado en una finca para robar. Una vez en el lugar de los hechos, su propietario les explicó que al ver movimientos salió de la casa, momento en que fue agredido con espray pimienta.
Seguidamente, los agresores rompieron la puerta del domicilio para acceder y lo amenazaron tanto a él como a su mujer para que no llamaran a la policía. De la residencia, según la víctima, se llevaron dinero y dos teléfonos móviles.
Con la descripción de los agresores, los agentes iniciaron una investigación por la zona. En poco rato, una patrulla de policía local de Santa Eulàlia de Ronçana localizó y paró a dos hombres escondidos detrás de un vehículo estacionado junto a la casa. Cerca de donde se habían escondido encontraron un cuchillo de grandes dimensiones. Los dos hombres fueron detenidos como presuntos autores de un robo violento.
Querían robar la marihuana
Posteriormente, después de escuchar la versión de los arrestados por el presunto robo, los Mossos d'Esquadra hicieron una entrada y registro de la casa donde localizaron 500 plantas de marihuana en diferentes estados de crecimiento y un kilo y medio cogollos. Además, los técnicos de la compañía eléctrica suministradora confirmaron que la instalación estaba manipulada de manera fraudulenta.
Todos los de la casa, detenidos o denunciados
Los agentes detuvieron al responsable de la casa y el jardinero de la plantación como presuntos autores de un delito contra la salud pública y defraudación de fluido eléctrico. También se denunció a un hombre y a una mujer familiares del arrestado y que también vivían en la casa.
Los arrestados por salud pública quedaron en libertad en la misma comisaría de los Mossos d'Esquadra, pendiente de ser citados en sede judicial cuando toque. Los arrestados por el robo violento pasaron a disposición judicial el día siguiente en el Juzgado de Guardia de Granollers y quedaron en libertad con cargos.
Los Mossos d'Esquadra han explicado que mantienen abierta una investigación para aclarar los hechos y no se descartan más detenciones.