Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado viernes 17 de octubre a un grupo de ladrones especializados en robos en la AP-7. No era la primera vez que los arrestaban, ni siquiera la décima o la vigésima. Se trata de tres individuos muy activos que, entre todos ellos, ya acumulan más de 140 antecedentes policiales. Esta última detención se produjo después de que cometieran dos asaltos en pocos minutos en la autopista en los que consiguieron un botín acumulado de 12.000 euros. No obstante, la rápida intervención policial pudo evitar que esta vez pudieran escaparse.

Roban 12.000 euros en dos asaltos en la AP-7 y acaban detenidos

El primero de los asaltos tuvo lugar alrededor de las tres de la tarde, cuando utilizaron el método del "pincharruedas", consistente en hacer creer a las víctimas que han pinchado una rueda, para distraer a unos viajeros a la altura de Olèrdola (Barcelona) y robarles 39.000 euros. Al ser alertados de los hechos, varias patrullas de los Mossos fueron hasta la zona y empezaron a buscar a los ladrones, momento en que recibieron un segundo aviso por otro hurto en el área de servicio del Penedès, dentro del término municipal de L'Arboç (Tarragona). En esta ocasión, se habían llevado un bolso de mano con 3.000 euros en el interior.

Los agentes hicieron un rápido despliegue por la autopista, especialmente en las áreas de descanso, para intentar localizarlos y evitar que pudieran seguir actuando. Poco después, gracias a la información facilitada por las víctimas, se pudo localizar el vehículo de los ladrones muy cerca de la misma área de servicio del Penedès, en el kilómetro 208. Al percatarse de la presencia policial, los tres asaltantes huyeron. Dos de ellos pudieron ser detenidos y arrestados prácticamente en el mismo lugar, mientras que el tercero fue detenido al cabo de unos minutos después de que se escabullera saltando un muro.

Unos habituales de los robos en la AP-7

Los tres delincuentes, tres hombres de 39, 47 y 49 años, de quienes no se ha facilitado la nacionalidad, quedaron detenidos por dos delitos de hurto. A uno de ellos, además, le pesaba una orden de detención por otro hurto cometido en la AP-7 el 27 de abril. Los tres individuos, con más de 140 antecedentes por robos acumulados, forman parte de un grupo dedicado a los hurtos a viajeros en las autopistas, especialmente en las áreas de servicio y de descanso, y actúan por toda Catalunya.

Se trata de ladrones especializados que operan de forma coordinada, con un reparto de roles claro y vehículos de alquiler que cambian periódicamente para dificultar su identificación. Su forma de actuar es seleccionar un vehículo estacionado en un área de servicio y mientras uno distrae a los ocupantes, el otro les roba las pertenencias aprovechando que dejan la puerta abierta. En caso de no conseguirlo, pueden llegar a pinchar las ruedas del vehículo para actuar cuando tengan que detenerse en el arcén de la carretera.