El padre de Carol Maltesi, la actriz de 26 años asesinada por su pareja, Davide Fontana en Italia y cuyos restos aparecieron el pasado 26 de marzo en las montañas cercanas al municipio de Brescia, ha roto su silencio tras la macabra historia sobre cómo murió su hija. Además, no supo nada hasta el descubrimiento del cadáver, que se encontró después de tres meses, ya que, según el relato del asesino, la mató el 10 de enero y fingió que estaba viva hasta ahora.
Los macabros mensajes del asesino de Carol Maltesi fingiendo que está viva
"Es un monstruo, ese hombre es un monstruo... En las últimas semanas, yo escribía a mi hija y él me respondía haciéndose pasar por mi Carol" relata el padre de la víctima, Fabio Maltesi, al medio Corriere della Sera. El hombre, que vive en Ámsterdam desde hace años, relata que tenía muy buena relación con su hija, a quien describe como "un ángel". Ahora se ha podido saber que el asesino de la joven es Davide Fontana, un banquero de 43 años y actor porno amateur que confesaba su asesinato esta semana.
"Pensaba que ella estaba bien y él ya la había matado, me envió incluso una felicitación por mi cumpleaños, y ahora descubro que era él quien me deseaba feliz cumpleaños, no mi hija", continúa, dejando ver el nivel de crueldad del asesino, que durante tres meses contestó mensajes desde el móvil de Maltesi, que era su pareja desde 2020, y por quien había dejado a su mujer. Él mismo detallaba este martes de madrugada a los carabinieri que la había asesinado mientras grababan un vídeo porno, a martillazos, y después le había cortado el cuello con un cuchillo de cocina.
"Me envió incluso una felicitación por mi cumpleaños, pero me escribí con su asesino"
Fabio Maltesi también explica que se escribía por WhatsApp con Carol, que en realidad era Fontana, y que le extrañó que tuviese el móvil apagado cuando la llamó en más de una ocasión, aunque asegura al mismo medio: "Luego le escribí y me contestó. Al menos, pensé que era ella. Pero ahora me entero de que estaba hablando con su asesino... qué locura, es increíble lo que ha hecho este hombre" además de la macabra celebración de su cumpleaños: "Hablamos por mi cumpleaños, o mejor dicho, yo quería hablar con ella porque siempre nos llamábamos por el cumpleaños, pero tenía el móvil apagado, así que nos escribimos. O mejor dicho, me escribí con su asesino".
Y confirma que sospechaba un poco, aunque no podía imaginar el macabro final de su hija: "En las últimas semanas, nunca me respondía de inmediato, sino que me escribía después de uno o dos días. Y después me di cuenta de que a menudo me enviaba mensajes copiados y pegados de los anteriores, no era propio de ella. Así que le pregunté si pasaba algo y ella, o mejor dicho su asesino, respondió que estaba en Dubai", pero ya estaba muerta.
El mismo medio italiano, el Corriere della Sera, avanzaba esta semana la confesión completa de Davide Fontana, que explicó que, después de asesinarla, intentó descuartizar y deshacerse del cadáver "durante tres días". Primero, aseguraba, compró "un hacha y una sierra para metales" para hacerlo, mientras limpiaba el apartamento de la víctima y lavaba los trapos en la lavadora. "Luego compré en Amazon un arcón congelador". Allí tuvo los restos durante días, hasta que intentó quemarlos en una barbacoa y acabó llevándolos en bolsas a las montañas en las que fueron encontrados.