Nuevo rescate de un grupo de niños y de sus monitores de campamento en las montañas catalanas. Este viernes alrededor de las cinco y cuarto de la tarde, el teléfono de emergencias 112 recibió una llamada que alertaba de que la lluvia había pillado a quince niños y cinco monitores, provocando que se perdieran mientras hacían una ruta por la zona de los Amorriadors, en la Alta Garrotxa, y que acabaron atrapados en una zona de difícil acceso a causa de la crecida de la riera de Beget, sin posibilidad de continuar el descenso por sus propios medios. Para atender la incidencia se activaron ocho dotaciones terrestres y el helicóptero de los Bombers de la Generalitat, con efectivos del Grupo de Actuaciones Especiales (GRAE) que subieron hasta el punto de la montaña donde se habían extraviado.
Los Bombers consiguieron localizar el grupo de colonias y los ayudaron a atravesar el río hasta una zona segura donde los esperaba el helicóptero para poder trasladarlos a la zona de la Farga donde habían dejado los vehículos, con los que no era posible acceder hasta el lugar donde estaban los niños y los monitores por la frondosidad de la vegetación. Finalmente, los llevaron hasta el pabellón municipal de Camprodon, donde han pasado la noche.
Uno de los monitores no pudo ser rescatado con el helicóptero
De los cinco adultos que iban con los menores, uno no pudo ser trasladado hasta la Farga con el helicóptero, ya que las tareas de gruaje se alargaron durante toda la tarde hasta que se hizo oscuro, imposibilitando un traslado seguro con la aeronave.
Por este motivo, el quinto monitor tuvo que hacer el camino de retorno a pie, acompañado en todo momento por efectivos del GRAE que se aseguraron que llegara en buenas condiciones hasta donde el resto del grupo esperaba que los llevaran a un sitio cubierto donde pasar la noche. Afortunadamente, todo quedó en un susto y los quince niños y los cinco monitores llegaron a Camprodon cansados, pero en buen estado.