Agentes de los Mossos d'Esquadra del Grupo Regional Titani de Barcelona especializado en la investigación de robos violentos de relojes han desmantelado un punto de receptación de relojes de lujo provenientes de robos violentos cometidos en Barcelona. En el interior del piso, situado en el distrito de Sant Martí, agentes especialistas en robos de relojes, los integrantes el equipo Titani, pudieron identificar a los autores de varios relojes en la zona más turística de la ciudad y pudieron llegar hasta el piso donde se escondían. Después de una investigación para poder acreditar que utilizaban el piso para esconder los relojes, con la colaboración de unidades de asalto del ARRO de los Mossos, entraron en el piso y confirmaron las sospechas.
Se localizaron trece relojes valorados en casi 400.000 euros que el hombre que los guardaba, que los compraba a los ladrones y después les venía a mafias del reloj, les escondía en diferentes objetos en el interior del domicilio donde vivía: un peluche, en zapatos e, incluso, en lámparas de techo para dificultar su localización en caso de entrada de efectivos policiales o de otros ladrones.
Un robo permite llegar hasta el almacén
La investigación se inició a raíz de una denuncia del día 5 de junio cuando se produjo un robo violento de un reloj valorado en 8.500 € en el distrito de Sant Martí. Los autores se movían en zonas donde había turistas, y coordinaban para seleccionar víctimas, proteger la actuación delictiva y garantizar la huida para evitar su detención.
Cuando se cometió el hecho, uno de los autores se acercó a la víctima por la espalda y la cogió del brazo donde llevaba el reloj. Le realizó varios tirones, hasta conseguir sustraerle y se marchó en patinete con otro hombre que vigilaba la actuación. El modus operandi utilizado en este caso se corresponde en lo que utilizan otros ladrones especializados en esta tipología delictiva. Acostumbraban a sustraer las pertenencias personales utilizando violencia premeditada para conseguir sus objetivos criminales. También acosaban a sus víctimas y si era necesario lo agredían para conseguir sus objetivos.
De Barcelona en todo el mundo: la mafia de los relojes robados
El Grupo Titani, que no solo se dedica a la guerra contra los robos a pie de calle, con seguimientos de los ladrones para poder cazarlos en caliente, también se hacen investigaciones para poder detener a los ladrones y todas las personas que están relacionadas con este tipo de robos que parece que se hayan instalado en la capital de Catalunya y sobre todo ahora, durante los meses de más calor. Los investigadores pudieron identificar un piso donde vivían autores de hechos delictivos y donde escondían los relojes para después colocarlos en el mercado ilícito. Durante la entrada y registro judicial en la vivienda se recuperaron 13 relojes de lujo valorados en casi 400.000 euros, escondidos en lugares poco comunes como zapatos, lámparas de techo y en un peluche.
Los investigadores trabajan con la hipótesis que detrás de la receptación de estos relojes que tienen un alto valor económico, incluso algunos son piezas exclusivas y únicas, hay redes criminales que se encargan de venderlos en el extranjero donde las posibilidades para seguir el rastro se reducen drásticamente. Muchos de estos relojes, cuando tienen valores muy importantes, y según ha podido saber ElCaso.com, salen por el aeropuerto del Prat, a las muñecas de los miembros de estas bandas criminales organizadas que se encargan de colocarlos al mercado negro de todo el mundo.
Dos ladrones, escapados de la policía
El hombre que pagaba por los relojes y que después, siempre presuntamente, los ponía en circulación al mercado negro acumula cinco antecedentes por delitos contra el patrimonio y quedó detenido por un delito de receptación. Dos ladrones más vinculados con el detenido que vivían en este domicilio. En la entrada los Mossos esperaban también encontrar a dos personas más, dos ladrones, que también estaban en busca y captura por los hechos del pasado 5 de junio, pero que no pudieron ser arrestados.
La policía cree que ya han escapado del país por, aseguran, la presión policial. Aunque la policía catalana no quiere facilitar las nacionalidades del detenido y de los dos que se han escapado, ElCaso.com ha podido saber que son jóvenes originarios del Magreb y en situación irregular en el Estado español.