La letra de los médicos es especial. Nadie sabe por qué, pero todos los doctores tienen una caligrafía única y diferente del resto del mundo. De aquí el dicho de "tener letra de médico" cuando no se entiende lo que está escrito. Parece que sólo la puedan entender entre los mismos médicos y los farmacéuticos, como si fuera un código cifrado para que la gente no lo pueda entender. De hecho, a veces ni ellos mismos. Eso es lo que le ha pasado a Guille, un farmacéutico que ha compartido a través de su perfil de Twitter una receta médica que le ha traído un cliente y que no se acaba de entender.

"Empezamos fuertes el fin de semana... ¿Que pone aquí"?, se preguntaba el farmacéutico, dando pie a qué los usuarios dieran su opinión. Rápidamente, el tuit se convirtió en viral y se llenó de comentarios de gente diciendo lo que creían que ponía, algunos con un alto sentido del humor. "Un nolotil con una copita de coñac", "Moblu Coñer", "Nolotil cápsulas, Malibú cañas", "Mahou cañas" o "Que beba coñac", decían algunos. Después de superar los 200 'likes' en la publicación, el farmacéutico compartió la respuesta que él creía que era real: "¡Nolotil, coño! No sabemos si el médico estaba enfadado o era Nolotil por vía vaginal. También conocido como Coñotil", decía con humor.

tuit receta viral
Tuit del farmacéutico con la imagen de la receta médica. / Foto: Twitter

Este farmacéutico publica recetas en que la letra de médico no se entiende

Esta receta médica en que la letra del médico no se entiende no ha sido la primera, y seguramente tampoco la última, que este usuario de Twitter comparte a su perfil con la intención de que sus seguidores contesten que les parece que pone. El farmacéutico ya lo ha convertido en todo un juego y cada vez que se encuentra con alguna de este estilo lo publica, dando la respuesta correcta al cabo de un rato.

Algunos usuarios aprovechan estas publicaciones para hacer algunas quejas o reivindicaciones como "que pongan un programa para imprimir las recetas y que salgan claras". Otros piden ayuda para descifrar sus propias recetas o explican anécdotas como "a veces, si la letra se puede entender, dudan de que lo haya escrito un doctor". Lo que está claro es que pasan los años y la letra de los médicos no cambia. Saber que han escrito se puede llegar a convertir en todo un misterio.