La Policía Nacional ha detenido esta mañana en Madrid a un peligroso depredador sexual infantil que, presuntamente, utilizaba su trabajo de profesor de colegio y cuidador de niños para abusar de menores.
Vídeos pedófilos en España detectados en Australia
Una investigación empezó a principios del año 2020 después de que el Servicio de Policía de Queensland, en Australia -colaboradora de la red para la protección de menores-, detectara material de explotación sexual de menores en foros de temática pedófila que podría localizarse en España.
Después de la recepción del material, compuesta por multitud de fotografías y vídeos que mostraban a diferentes menores siendo víctimas de explotación sexual, se iniciaron las tareas para conseguir la identificación de los sitios donde se pudo haber generado todo el material.
Se empezó a sospechar de una escuela ubicada en Madrid, y que las víctimas fueran alumnas de primaria.
Una escuela de Madrid y niñas de primaria
Una vez localizado el centro educativo, los investigadores se centraron en analizar al personal que trabajaba, pero nadie tenía antecedentes judiciales ni policiales por hechos parecidos.
Paralelamente, se descubrió que el móvil que había grabado el material pedófilo tenía un sistema operativo en inglés.
Aunque no encontraron antecedentes, la facilidad de acceso a niños y niñas por parte del agresor solo se podía explicar si se trataba de un docente.
Y entonces se empezó a sospechar de una posible falsificación documental por parte de alguien de los investigados.
Un 'profe' que resultó ser un depredador sexual
Efectivamente, los agentes pudieron pillar a un profesor de nacionalidad inglesa que había cambiado su identidad al llegar a España y a quien constaban antecedentes por hechos de la misma naturaleza en el Reino Unido.
De hecho, había sido condenado a su país de origen a dos años de prisión por poseer imágenes de explotación sexual infantil y varias sanciones por daños y perjuicios.
A la vez que se localizaba el domicilio del hombre, se identificaron tres de las niñas que salían en algunas imágenes y vídeos.
El registro de la casa y dispositivos del presunto agresor fueron técnicamente muy complicados a causa de las diversas técnicas de encriptación y ocultación que utilizaba para esconder el contenido pedófilo.
Identidad falsa y 36 víctimas de entre 4 y 8 años
También se encontraron varios documentos falsificados utilizados por el detenido para entrar en España y conseguir trabajo como profesor con una identidad falsa y pasando desapercibido.
Uno de los documentos manipulados era el registro de antecedentes por abusos sexuales a menores, necesario en el país para trabajar con niños y niñas.
Los 10 dispositivos informáticos confiscados han permitido extraer un gran volumen de material en el que se identificaron 36 víctimas de entre cuatro y ocho años.
Además, se descubrió que el presunto agresor hacía de cuidador de niños a domicilio de forma ocasional.
Con estas pruebas se ha podido acreditar la comisión de delitos de abuso sexual a menores y descubrimiento y revelación de secretos, procediendo a su detención y a la espera de su paso por los juzgados.