Dos hombres y una mujer han ingresado en prisión provisional sin fianza, acusados de haber asesinado a un hombre en un piso ocupado de la calle de l'Església de Valls, capital de la comarca del Alt Camp. Los Mossos d'Esquadra encontraron el cadáver enterrado en los bajos de un edificio de la localidad el martes pasado, y el mismo día detuvieron al primer implicado, un joven de 23 años. Al día siguiente la policía catalana hizo dos arrestos más: otro hombre, de 30 años, y una mujer, de 47. Según las primeras investigaciones, la víctima, de 45 años, tenía problemas con las drogas y colaboraba con sus presuntos asesinos haciendo robos por todo el pueblo de Valls. La cuarta involucrada en el crimen, otra mujer, fue detenida el jueves pasado, y ha quedado en libertad provisional con la obligación de comparecer cada semana en el juzgado.
Los cuatro detenidos han prestado declaración este viernes ante el juzgado de instrucción número 3 de Valls, y la magistrada ha abierto una causa por delito de homicidio. Tal como informó ElCaso.cat, los cinco (los presuntos asesinos y la víctima) formaban parte de un grupo de delincuentes que se dedicaban a efectuar robos, la mayoría de carácter violento, por todo el municipio, y también estarían implicados en tráfico de drogas.
Encontraron el cadáver en un avanzado estado de descomposición
Según los Mossos d'Esquadra el cadáver que apareció semienterrado en los bajos de este bloque ocupado pertenecía a un hombre que hacía varios días que había desaparecido. El cuerpo presentaba evidentes signos de violencia y estaba en un avanzado estado de descomposición, hecho que confirma la teoría de que el asesinato se había consumido hacía un tiempo. Además, el lugar donde lo encontraron, un edificio que albergaba a la mayoría de delincuentes de Valls y que escondía un antro de droga, permitió a los agentes del Área de Investigación Criminal (AIC) del Campo de Tarragona a estrechar el cerco y encontrar rápidamente a los presuntos asesinos.
A estas alturas, la investigación sigue abierta para aclarar las circunstancias de la muerte de este hombre, así como el móvil de los presuntos autores del crimen. Por otra parte, este caso ha llevado también a vaciar este edificio "multiuso", hecho que ha permitido a los vecinos de Valls respirar con tranquilidad, sabiendo que las personas que vivían allí han tenido que buscar otro sitio donde establecerse, lo cual, seguramente, propicie una bajada significativa del nivel de criminalidad de este municipio de cerca de 25.000 habitantes.