La discoteca Waka Sabadell vuelve a estar en el centro de la polémica. Dos controladores de acceso de este establecimiento de ocio nocturno de Sant Quirze del Vallès están siendo investigados por los Mossos d'Esquadra por comportamientos racistas y negarse a dejar entrar en el local a las personas por su origen y color de piel. Los hechos habrían tenido lugar a finales de 2021 y durante todo en el 2022, y dos chicas y un chico han presentado dos denuncias a la policía catalana, que abrió una investigación sobre los hechos.

Los investigadores comprobaron la veracidad de las denuncias, que describían conductas discriminatorias constitutivas de un delito de odio, y confirmaron que estos incidentes se habían producido. Además, según se ha podido determinar, más allá de vetar la entrada de los clientes por su color de piel, en algunos casos cuando las personas afectadas se quejaban de la situación y pedían la hoja de reclamaciones, los porteros les negaban el documento, aunque es un derecho que tenían para poder quejarse formalmente al establecimiento.

Acusaciones de racismo desde hace años

Después de una larga investigación, agentes de la Unidad Central de Delitos de Odio y Discriminación de la Comisaría General de Información, han podido identificar a los dos porteros que habrían negado el acceso a los clientes por motivos racistas y les ha citado en comisaría para tomarles declaración y conocer su versión de los hechos. La investigación a los dos controladores de acceso se suma a las muchas polémicas que rodean la discoteca Waka Sabadell, que desde hace años ya está acusada de comportamientos racistas y discriminación por parte de sus porteros, algunos de los cuales han presentado enfrentamientos con los clientes. Además, el establecimiento también cuenta con un largo historial de agresiones sexuales o peleas multitudinarias.