La policía de Córcega, en Francia, ha abatido a tiros a un hombre que paseaba por las calles armado con un cuchillo amenazando a varios viandantes y personas que se encontraban en un bar. Los agentes han intentado convencerlo de que se detuviera y entregara las armas, pero el hombre no les hacía caso. Tras un tenso rato, lo han disparado con una pistola eléctrica Taser para conseguir reducirlo, con el fin de no tener que utilizar la fuerza letal. Finalmente, sin embargo, cuando el hombre armado se ha girado en dirección a un agente, con intención de atacarlo, uno de los policías le ha disparado tres tiros con el arma reglamentaria para evitar que agrediera a su compañero, unos ataques que han resultado ser mortales.

 

Los hechos han tenido lugar en Ajaccio, la capital de Córcega. Según informan medios de la isla, el incidente ha sido esta mañana, cuando la policía se ha desplazado a la calle Napoleón, al recibir el aviso de un peligroso hombre que merodeaba por la calle armado con un cuchillo de grandes dimensiones. El hombre mostraba una actitud violenta, amenazando a los viandantes con los que se cruzaba y a otras personas que estaban en un bar. Rápidamente, la policía se ha desplazado para pararle los pies, un objetivo que solo han podido alcanzar poniendo fin a la vida del individuo.

Lo ha matado para evitar que agrediera a un policía

El agresor, un hombre de 26 años, de origen senegalés, no tenía antecedentes penales, pero sufría cierta inestabilidad mental. Los agentes han intentado detenerlo sin utilizar la fuerza, pidiéndole que se detuviera, una estrategia que ha resultado inútil. También han probado de reducirlo con la pistola Taser, pero esto tampoco ha dado resultado, sino que lo ha enfurecido aún más. El hombre armado, después de que intentaran reducirlo, se ha lanzado contra uno de los agentes, al parecer, con intención de herirle con el cuchillo. Ante esta situación, para evitar que el policía sufriera daño o, directamente, perdiera la vida a causa del ataque, se ha abierto fuego contra el asaltante, que ha recibido tres disparos que le han causado la muerte allí mismo.