Los Mossos d'Esquadra continúan adelante con el plan DAGA, una iniciativa con el objetivo de reducir la presencia de armas blancas en las calles para garantizar la seguridad de los ciudadanos. El plan ya hace tiempo que está en marcha y ha contado con macrooperativos por toda Catalunya que han llegado a encargarse de centenares de puntos calientes, sobre todo en zonas de ocio nocturno. En este último dispositivo, los Mossos, la Policía Nacional y la Policía Local de Girona se han centrado en los polígonos industriales, y han obtenido resultados importantes.

El operativo tuvo lugar ayer por la mañana y duró cinco horas, de nueve a dos. Los tres cuerpos policiales recorrieron durante este rato varias naves industriales de Girona, lugares donde a menudo hay aglomeraciones de personas armadas con navajas y cuchillos y que, por lo tanto, son el escenario perfecto para llevar a cabo este tipo de dispositivos para requisar armas blancas y evitar que se utilicen en posibles peleas o delitos. Durante las cinco horas que duró el despliegue, se pudieron identificar treinta y ocho personas y requisar un total de diecisiete armas blancas, como navajas y cuchillos; un hacha y una pistola simulada, sin capacidad real de disparar. Aparte de las armas se obtuvieron también varias herramientas, tal como se puede ver en la imagen, como alicates, tijeras o destornilladores, y varios objetos como cuatro móviles y dieciséis joyas de los cuales no se pudo verificar la procedencia, por lo que los agentes interpretaron que muy posiblemente eran robados y los decomisaron.
Plan de prevención
en cuanto a detenciones, hubo pocas, ya que si bien se identificó casi una cuarentena de personas, solo se acabaron haciendo cuatro detenciones, todas ellas por parte de la policía nacional, relacionadas con problemas de extranjería. También se abrieron dos actas por posesión de drogas, pero ni los Mossos d'Esquadra ni la Policía Municipal no arrestó a nadie por estos hechos ni por la posesión de armas blancas ni tampoco por los objetos que, según sospechas policial, podrías haber estado robados. Los cuerpos confían que este tipo de operativos sirvan para reducir los incidentes con personas heridas o muertas por agresiones con armas blancas, y también permite tener identificados posibles sospechosos en caso de que haya problemas. De esta manera, la policía busca enviar el mensaje que cargar armas blancas tiene consecuencias, un mensaje, sin embargo, que pierde bastante si no se detiene sus portadores.