Agentes de la Policía Local de Castelló d'Empúries y de los Mossos d'Esquadra han detenido a un hombre que había roto la orden de alejamiento que tenía con respecto a su expareja al perseguirla con varias armas para, presuntamente, atacarla. Los hechos tuvieron lugar este martes por la tarde en el paseo marítimo de Empuriabrava, cuando una mujer llamó atemorizada al 112 para pedir ayuda y alertar a los servicios de emergencias de que un hombre que no se podía acercar a ella por orden judicial la estaba persiguiendo.
El hombre llevaba varias armas encima
Hasta el lugar de los hechos se activaron rápidamente dos patrullas de la Policía Local y otra de los Mossos d'Esquadra desde la comisaría de Roses, por miedo a que le pudiera pasar alguna cosa grave a la persona que había hecho la llamada de emergencia y no fuera secuestrada o agredida en medio de la calle. Al llegar al paseo marítimo de Empuriabrava, los agentes se encontraron a un hombre y una mujer que estaban forcejeando entre ellos. Además, descubrieron que el hombre llevaba encima una navaja, un espray de defensa y una pistola eléctrica con la cual intentaba atacar a la mujer.
Después de separar a las dos personas, los agentes pidieron la documentación al hombre a fin de que se identificara y comprobaron que pesaban sobre él dos órdenes judiciales vigentes y que las dos estaban siendo infringidas en aquel momento. Por una parte, tenía una orden de alejamiento con respecto a la mujer con la cual estaba forcejeando y no se podía acercar a ella a menos de una determinada distancia. Por la otra banda, tenía prohibido llevar armas y llevaba dos encima, la navaja y la pistola eléctrica. Por este motivo, el hombre fue detenido en el mismo momento acusado de ser el presunto autor de un delito de ruptura de condena.