La calle Larios de Málaga, una de las arterias comerciales más lujosas de España y también de las más caras, sufrió la irrupción de un coche Porsche Cayenne a gran velocidad, cuando está restringida la circulación de vehículos y es totalmente peatonal desde hace 20 años. Con la música a todo volumen y con un brazo fuera del automóvil, un hombre de 38 años y nacionalidad bielorrusa se adentró por la céntrica avenida de tiendas de moda y, hasta llegar a la plaza del carbón, casi atropella a seis personas, según ha adelantado Diario Sur. Los hechos se produjeron este lunes hacia las diez y media de la noche, un momento en el que la calle Larios todavía está muy concurrida aunque muchos de los establecimientos a esa hora ya han bajado la persiana.

Casi atropella a seis personas y arrastra a una chica de unos 18 años

El Porsche Cayenne de color blanco atravesó el arteria peatonal y comercial de Málaga, donde además estos días tiene una exposición por el Festival de Cine internacional de la ciudad. Varios testimonios recogidos por el medio citado, han asegurado que el coche iría a unos 70 kilómetros por hora, aunque otros manifiestan que iba todavía más rápido. Mientras circulaba con la música a todo trapo, la Policía Local intentó hacerle indicaciones para que se detuviera pero bien porque no los escuchó o porque no quiso continuó su recorrido. Así, estuvo a punto de atropellar a seis personas que afortunadamente consiguieron evitar el automóvil a tiempo.

Pero no tuvo la misma suerte una chica de unos 18 años que se encontraba cerca de las discotecas del centro de Málaga. La joven, que estaba con una amiga y acababa de presenciar cómo dos relaciones públicas de los locales de ocio nocturno casi son atropelladas por el Porsche Cayanne, fue cogida por el conductor del vehículo y la arrastró unos diez metros. Ella hizo todo el posible para no caer al suelo y empezó a correr tanto como pudo hasta que el hombre la soltó.

La Policía Local de Málaga detuvo el conductor

Tras estos sucesos, los agentes de la Policía Local de Málaga se subieron al coche patrulla e iniciaron una persecución por la calle Granada. Sirenas, luces de emergencia... No había nada que lo parara. Pero una gran aglomeración en la plaza del Carbón si que lo hizo. Los policías aprovecharon entonces para identificar el conductor, originario de Bielorrusia y de 38 años, que no tiene antecedentes en España. Además, el vehículo no figuraba como sustraído, así que no era fruto de un robo. Finalmente, fue detenido por un delito contra la seguridad vial y por conducción temeraria.