Un niño de dos años ha llegado con unos fuertes dolores en la barriga a un hospital de Ibiza y ha acabado dando positivo en drogas. Concretamente en sustancias tan agresivas como la ketamina y la cocaína. En el centro médico, curiosamente, diagnosticaron al pequeño, al principio, con una apendicitis, una evaluación que más tarde fue rechazada. Los padres del enfermo, un hombre de origen sudafricano de 31 años y una mujer colombiana de 27, según ha explicado la Policía Nacional este miércoles, lo habían llevado a urgencias tras observar que presentaba una dolencia abdominal excesiva, de la cual se quejaba enérgicamente.

La voz de alerta se dio desde el área de protección de menores del Hospital Can Misses de Ibiza. Cabe decir que el personal médico, tras un primer diagnóstico por apendicitis en el niño de dos años, no estaban del todo seguros y decidieron entrevistarse con los padres. Los familiares del menor manifestaron entonces ser consumidores habituales de distintas sustancias estupefacientes, por lo que se le realizaron varios análisis complementarios, obteniendo un resultado positivo en cocaína y ketamina.

Detienen a los padres por malos tratos y el niño es derivado a un centro de acogida

Una vez confirmadas las pruebas, desde el servicio de protección de menores del centro médico ibicenco procedieron con carácter urgente a la retirada de la custodia del menor como medida de protección. Inmediatamente después, comunicaron los hechos al Grupo de Policía Judicial UFAM de la Policía Nacional de la Comisaría Local de Ibiza. Los agentes, entonces, se hicieron cargo de la investigación, llevando a cabo las gestiones oportunas con el Ministerio Fiscal, al cual comunicaron la situación del riesgo del pequeño para su ingreso en un centro de acogida.

Por último, la Policía Nacional detuvo finalmente, tras estas gestiones de protección del niño de dos años, a los padres de 31 y 27 años y nacionalidades sudafricana y colombiana, respectivamente. Están acusados de ser los presuntos autores de un delito de malos tratos en el ámbito familiar después de que su hijo, de tan solo dos años de edad, diera positivo en estas dos sustancias estupefacientes. Ambos progenitores ya han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Ibiza.