Agentes de la Policía Local de Rota, en Cádiz, han rescatado a un niño de 8 años que esta pasada noche se había escapado de casa mientras sus padres dormían para ir a jugar al parque de bolas de un conocido establecimiento de comida rápida. Los progenitores se han dado cuenta de que el menor se había marchado cuando han recibido el aviso de los policías municipales, que lo habían encontrado en este equipamiento infantil vestido con pijama, descalzo y con una mantita que había cogido antes de salir para no pasar frío.

El niño de 8 años se ha marchado de casa mientras los padres dormían para ir a jugar a un parque de bolas

Según han podido saber los policías, el niño se había marchado de casa durante la noche mientras sus padres estaban durmiendo en su habitación. El menor ha salido por la puerta sin hacer mucho ruido para que no lo detectaran y ha bajado a la calle para ir hacia un Burger King que hay a pocos metros del domicilio. Allí ha podido meterse dentro del parque de bolas que había en el exterior del establecimiento al aire libre, uno de los lugares preferidos del niño y donde más se divierte.

Hacia las 7.20 horas de la mañana, una persona que ha visto al niño en el interior del parque infantil ha llamado a la Policía Local de Rota para advertirlos. Varios agentes se han desplazado hasta el lugar y han encontrado al menor jugando en el parque infantil con el pijama puesto, sin zapatos y con una manta que había cogido antes de salir. Los agentes han conseguido localizar a los padres rápidamente gracias a la colaboración ciudadana y los progenitores no han tardado mucho tiempo en llegar para reencontrarse con su hijo.

¿Qué hacer si un hijo se escapa de casa?

Una de las peores pesadillas que puede tener un padre es que su hijo se escape de casa. Lo más importante es mantener la cabeza fría e intentar encontrarlo cuanto antes mejor, pensando cuáles son sus lugares favoritos o dónde se podría esconder. También hay que denunciar la desaparición rápidamente e informar los familiares y amigos, que pueden ayudar a encontrarlo con más facilidad. Una vez aparezca, hace falta hablar con él tranquilamente sobre qué ha pasado para que no se repita y hacerlo sin que haya personas en frente.