La muerte de un hombre de 94 años en Alicante ha terminado con la detención de su hijo, un cirujano, al cual se considera el responsable de la muerte de su padre después de que le hiciera una operación improvisada en la cocina de su casa para amputarle dedos de los pies, lo que causó una infección y la posterior muerte del hombre. La Policía Nacional arrestó al hombre de 55 años acusado de un delito de homicidio.

Los hechos tuvieron lugar durante el fin de semana, cuando el hombre de edad avanzada volvió a la residencia para personas mayores donde vivía después de pasar unos días en casa de su familia. El personal del centro detectó que al hombre le faltaban algunos dedos de los pies, concretamente, tres dedos de un pie y dos del otro, y vieron que parecía que la zona operada estaba infectada. A causa de su estado, se decidió que el hombre ingresara en el Hospital de Sant Joan y, posteriormente, en el Hospital General de Alicante, donde, a pesar de los cuidados de los profesionales, acabó perdiendo la vida el martes a causa de una infección grave.

Al centro se presentó una familiar del ingresado que no se quiso identificar, lo que pareció sospechoso al personal sanitario, motivo por el cual informaron a las autoridades. Finalmente, la Policía Nacional se hizo cargo del asunto y empezó una investigación para descubrir cómo había perdido a la víctima los dedos de los pies. Después de identificar a los familiares, se llegó a la conclusión de que la operación podía ser cosa de su hijo, un cirujano, pero todavía hacía falta saber por qué.

Operado en la mesa de la cocina

Resulta que la víctima tenía de problemas de circulación, y sufría una gangrena en los dedos de los pies, lo que impulsó a su hijo a amputarle para evitar que se propagara. En vez de solicitar ayuda profesional o de trasladarlo a un hospital, el cirujano lo operó en la cocina de su casa, en un espacio nada preparado por una intervención y que no estaba en las condiciones higiénicas necesarias. Después de que el anciano muriera, agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) detuvieron al hijo como autor de un delito de homicidio, que podría estar en grado doloso, ya que, a causa de sus conocimientos médicos, se considera que era consciente del riesgo que comportaba aquella operación y de los efectos que podía tener en su padre.