Una joven de 21 años, Catalina Torres Ibarra, trabajaba en un parque de grandes felinos, el Parque Safari Rancagua, en Chile, cuando fue atacada mortalmente por un tigre mientras limpiaba la jaula de uno de los vehículos.
Muere atacada por un tigre
Catalina Torres Ibarra, de 21 años, que ahora ha sido identificada por la policía de Chile, fue asesinada en el recinto de grandes felinos el viernes. Fue enviada por sus superiores para realizar labores de limpieza en unas jaulas.
Al llegar, fue atacada por uno de los felinos, un tigre, que le rajó el cuello. Tras el incidente, el personal de seguridad del parque logró rescatarla de la jaula e intentó reanimarla, hasta que llegaron tres dotaciones de los bomberos y los servicios de emergencias, que finalmente no pudieron hacer nada por reanimarla y confirmaron la muerte de la joven.
La jaula estaba abierta y nadie le avisó
Pero no todo fue un accidente, ya que después de la tragedia, su compañero de trabajo, Leonardo Maluenda, ha revelado ahora que nadie le avisó de que la jaula estaba abierta.
Maluenda contaba en medios locales que "Lo más lógico es que te digan que tengas cuidado si vas a limpiar ahí porque el tigre anda suelto, pero no le avisaron".
Rancagua Parque Safari en Chile
El parque de felinos de Rancagua, al sur de la capital del país, Santiago de Chile, tiene como objetivo mostrar los hábitats de los animales de forma natural en lo que son vehículos reforzados. Estos, normalmente camionetas, tienen como remolque una jaula en la que viajan los visitantes para ver desde dentro a los felinos, que pueden incluso subir a los vehículos como parte de la experiencia, tal y como muestran las imágenes promocionales.
Pero el riesgo más grande lo corren los trabajadores que limpian y mantienen las instalaciones, aunque normalmente no están en peligro. Sin embargo, un fallo en la seguridad o una pequeña negligencia acabaron con la vida de la joven chilena de 21 años, Catalina Torres, que hacía dos años que trabajaba en el parque y a quien presuntamente no avisaron de que la jaula del tigre no estaba cerrada. Y el felino salió y la atacó, hiriéndola de muerte en el cuello.
Investigan una posible negligencia
Dentro de la empresa se ha abierto una investigación, ya que hubo un juego de culpas tras el incidente. El gerente de finanzas del parque, Antonio Rojas, afirmó que un grupo de trabajadores había abierto deliberadamente la jaula de los tigres contra el protocolo. Sin embargo, los trabajadores en cuestión han negado firmemente las acusaciones diciendo que la jaula ya estaba abierta.
Paralelamente, según el parque, ninguno de los deberes de Catalina implicaba tener contacto directo con ninguno de los animales, ya que durante el trabajo del personal los felinos permanecen encerrados. Ahora, el safari permanece cerrado mientras la policía investiga las denuncias de posible negligencia y se desconoce qué ha pasado con el tigre.
La Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones se encargará de la investigación para esclarecer los hechos, que pasan a disposición de la fiscalía de Rancagua.