Los Mossos han dicho basta y aceptan el problema. La Mina, y los barrios Besòs y la Pau, están fuera de control y hace falta saturar el barrio de policía para recuperar la normalidad y evitar que los clanes de etnia gitana sean los amos y señores y hagan la vida imposible a los vecinos de buena fe que viven en esta zona a caballo entre Barcelona y de Sant Adrià de Besòs. Las regiones policiales que comandan a los comisarios Sergi Pla y Montserrat Estruch, la Nord y Barcelona, han reforzado el dispositivo Límit, un dispositivo policial de seguridad ciudadana y mantenimiento del orden público que tiene como objetivo abordar conjuntamente las problemáticas delincuenciales que se dan en los barrios de la Mina, Besòs y la Paz, con las comisarías de Sant Adrià y del distrito de Sant Martí de Barcelona.
Aunque la mayoría de los incidentes con armas de fuego que se han registrado los últimos meses se han registrado en la Mina, los tres barrios, también Besòs y la Pau, comparten unas mismas características que a veces hacen aflorar conflictos de convivencia y situaciones de inseguridad ciudadana. La situación es crítica y nadie esconde que hay que actuar antes de que sea, si es posible ya, demasiado tarde.
Tiroteos cada semana en la Mina
Tal como hemos adelantado y explicado en varias ocasiones en ElCaso.com, las últimas semanas han sido movidas en esta zona, con un incremento de incidentes graves con uso de armas de fuego y personas heridas. Sacados en fachadas cada semana por las revanchas, muchas relacionadas con el tráfico de drogas, entre clanes familiares de etnia gitana que pugnan por el control del barrio de la Mina. El objetivo de tener más fuerza en la zona, con ARRO y Brimo, será hacer más controles de seguridad y más identificaciones de vehículos y personas para detectar armas de fuego, armas blancas y tráfico de drogas, según ha podido saber ElCaso.com. Aprovechando que ahora la Brimo de los Mossos disponen de efectivos de noche, durante toda la semana, se han planificado controles y puntos estáticos en la zona para recuperar el control.
La línea estratégica de la comisaría Estruch y del comisario Pla implica tener más presencia policial a la calle, uniformados o de paisano, y poder conseguir más conocimiento de que está pasando al barrio. Con más inteligencia operativa, del análisis de información recogido a partir de las identificaciones, patrullajes y controles de seguridad ciudadana, puedes actuar con más efectividad, situando a las patrullas en lugares más estratégicos y, al mismo tiempo, tener más capacidad operativa para reaccionar delante de posibles de tiroteos como los de las últimas semanas.
Más investigación
Además de este incremento de policial en la calle, visible, también se ha intensificado la colaboración entre las dos unidades de investigación de las comisarías de Sant Martí y de Sant Adrià y la DIC de Barcelona y de Metropolitana Nord para poder investigar los hechos delictivos registrados en la Mina, sobre todo los que implican uso de armas de fuego. Esta semana los Mossos, con el GEI y la Unidad de Drones, asaltaron un piso para detener a un hombre, de 24 años, de nacionalidad española, relacionado con el tiroteo del día de la Mona, donde una mujer resultó herida en una pierna por una bala perdida.